Finalizan la nueva zona de ocio a la entrada de la villa

j.a.barrio planillo | la robla

Los vecinos de La Robla disfrutan desde ayer de una nueva zona recreativa a la entrada de la localidad en la principal arteria de la villa de Ramón y Cajal, en la que se ha instalado la máquina de vapor Olabarri, que data del año 1882, que fue cedida por la Hullera Vasco Leonesa, y que está ya totalmente restaurada. Una obra muy compleja que ha corrido a cargo del tornero Juan manuel García que ha puesto toda su sabiduría en la restauración de esta afamada locomotora.

Entre sus características La Olabarri conserva ruedas con radios en H y doble centro, y además cuenta con topes unificados Norte, una modificación muy habitual en las locomotoras industriales de la cornisa cantábrica. Tenía una potencia de 221 caballos, unas ruedas con un diámetro de 1,079 metros y era capaz de desarrollar un esfuerzo de tracción de 2.436 kilos. La Olabarri en la HVL Las minas de Santa Lucía de Gordón estaban conectadas con los lavaderos de la Compañía del Norte mediante una línea férrea, y a su vez hasta los lavaderos llegaba un cable aéreo procedente de Ciñera. Para el tan necesario transporte de carbón y trasiego de vagones entre el lavadero y las vías de la Compañía del Norte, y posteriormente con Renfe, se emplearon hasta tres locomotoras adquiridas de segunda mano. La Olabarri no cae en el olvido, y permanece ahora en La Robla totalmente restaurada como testigo mudo del pasado y desarrollo de toda una comarca. A la cesión de la máquina hay que sumar el apoyo de Tudela Veguín y Naturgy para afrontar su restauración además de la creación de los jardines a cargo del taller mixto de Formación y Empleo “RoblaNatura II” subvencionado por la Junta.

El presupuesto total de la nueva zona de ocio asciende a 60.000 euros.