El alcalde asegura que existe buena sintonía con los responsables en León
Villamañán pedirá a Patrimonio la cesión del convento para su uso
Imagen del convento de San Pedro de Alcántara de Villamañán, vacío desde 2013. MEDINA
El Ayuntamiento de Villamañán pedirá a Patrimonio la cesión del convento de San Pedro de Alcántara para su uso y mantenimiento. El acuerdo de solicitud ya fue aprobado en pleno y ahora está el informe en periodo de exposición pública por si algún afectado quisiera presentar alegaciones.
En convento se encuentra vacío desde que las últimas monjas clarisas se fueran en abril de 2013. Aún así se ha seguido celebrando el culto religioso de la localidad en la iglesia de las instalaciones y dos personas, antiguos criados de las monjas, residen en el inmueble.
El alcalde, Higinio García, aseguró que ambas cosas seguirán realizándose. En sus diversas reuniones con la responsable de Hacienda en León, García señala que ha habido buena sintonía que la vía para su cesión es la solicitud formal basada en un informe, que ha sido elaborado, y que será enviado una vez finaliza el periodo de exposición pública. García se muestra optimista por lo que ha percibido de la responsable de Hacienda en León. Una vez que se consiga la cesión por parte del Ayuntamiento que, en principio, tendrá un carácter indefinido, éste podrá realizar un convenio con el Obispado por un periodo concreto de años para que se pueda seguir celebrando el culto en la iglesia. Convenio al que el regidor es favorable.
El resto del edificio, según García, se dedicará a usos culturales o de cualquier otra índole. «Habrá que estudiarlo», señaló.
La huerta, por vía judicial
Por otra parte el Ayuntamiento reclamará judicialmente la propiedad de la huerta del mismo convento que Patrimonio registró a su favor en la década de los noventa del siglo pasado.
Haciendo un repaso histórico, en 1626 el Regimiento de Villamañán compró un solar a las Puertas de Laguna que cede a los franciscanos para hacer una abadía que se inaugura en 1633. Los frailes la abandonan en 1835. En 1842 el Estado cede el usufructo del edificio para destinarlo a cárcel, escuela, cátedra de latinidad y pósito.
Es en 1847 cuando el Ayuntamiento compra la huerta por 41.000 reales con escritura a favor del Común de Villamañán. En los sucesivos arriendos siempre el consistorio ha ejercido como propietario.
Otra justificación importante de la propiedad municipal de la huerta es que en 1897 el Estado expropia y paga al Ayuntamiento (lo que quiere decir que es su propietario) 7.088 pesetas por una parte de la huerta para construir la carretera Mayorga-Astorga.
Y en 1923 fue también el Ayuntamiento quien la cedió a las monjas que años antes se habían instalado en el convento. Estuvieron hasta 2013, fecha en la que la huerta debería haber revertido al Ayuntamiento. Pero en la década de los noventa Patrimonio la había registrado a su favor sin mediar venta, ni expropiación. Por ello ahora la reclamará judicialmente.