EL ESTADO DE LA SANIDAD
Laciana se queda sin pediatra por las vacaciones del único profesional
Solo los médicos de cabecera de los padres atienden a los pequeños
El helipuerto del centro de salud de Villablino.
La comarca de Laciana se encuentra sin pediatra desde hace unos días, ya que el especialista que ocupa este puesto se ha quedado de vacaciones y la Junta de Castilla y León no ha dejado un sustituto en el citado puesto.
Ante esta situación, los pequeños que precisan la atención del Servicio de Pediatría son atendidos por el médico de familia de alguno de los progenitores que si lo consideran oportuno y tras valorar su estado de salud, los derivan al Hospital de Ponferrada.
El Servicio de Pediatría atiende a todos los menores de 14 años de la comarca. A pesar de que las pedanías tienen consultorio médico, los niños tan sólo disponen de atención médica en el centro socio-sanitario y, por lo tanto, tienen que acudir hasta la cabecera de comarca para recibir asistencia.
El alcalde de Villablino, Mario Rivas, calificó la suspensión del servicio de «falta de previsión» por parte de la Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León y destacó la necesidad de disponer de profesionales de la especialidad en la comarca y más en época estival. «Queremos que esta situación se solucione. Más en verano, cuando la población en el valle se duplica». Para Rivas afirmó que esta falta de especialista se deriva «de tener tan solo uno en la comarca. En su momento, el pleno denunció la pérdida de uno de los dos especialistas», matizó.
Desde hace unos meses, el servicio de cuenta con una plaza cubierta, mientras que la segunda continúa vacante y por el momento continúa a la espera de ser ocupada. En su momento, la Junta de Castilla y León declaró que ya buscaba a un profesional que se pudiera ocupar de este puesto y que no entraba en sus previsiones amortizar ninguna plaza de pediatría.
650 NIÑOS
En cualquier caso, el servicio se ha visto mermado paulatinamente, pasando de dos especialistas durante cinco días a la semana a reducir las consultas de uno a tres y, algo más tarde, a solo dos hasta que, finalmente, se produjo la vacante. De estas suerte, el único pediatra que quedó se hizo cargo de los 650 posibles pacientes del valle de Laciana a los que consulta en horario matinal, de lunes a viernes.