Denuncian obras «clandestinas» en el Camino a su paso por Foncebadón
ical/a.r.
La Fraternidad Internacional del Camino de Santiago (Fics) denunció ayer que unas obras «clandestinas» provocaron la destrucción de un tramo de casi un kilómetro del Camino de Santiago Francés, en la subida a la localidad leonesa de Foncebadón. Según la denuncia, los trabajos para abrir un nuevo camino de más de cinco metros de anchura sobre la histórica senda «atentan gravemente» contra un elemento declarado Patrimonio Mundial por la Unesco y carecen de elementos informativos sobre la empresa que los ejecuta o la institución que los promueve.
En ese sentido, los representantes de la Fics lamentaron que la intervención «ha transformado un camino histórico, que debería conservar su traza y forma tradicional, en una gigantesca e inhumana pista forestal, ancheada artificialmente por maquinaria pesada», lo que habría provocado destrozos en el patrimonio cultural y natural de la Ruta Jacobea. Este «atentado sin sentido», además, convertirá el recorrido «en un polvoriento acceso en verano y en un enorme barrizal en invierno», auguraron.
En la misma línea, consideraron que la actuación supone «un atentado flagrante al medio natural» porque «afea el paisaje y desvirtúa el Camino», algo que consideraron «tan punible legalmente como destruir cualquier catedral española» y que calificaron de «expolio al patrimonio».
Las mismas fuentes subrayaron que el Camino de Santiago es «fuente de riqueza» para muchos pueblos de la denominada España vaciada y lamentaron que sea «menospreciado, ninguneado y destruido impunemente».
No obstante, el alcalde de Santa Colomba de Somoza, José Miguel Nieto, –municipio al que pertenece Foncebadón– indicó que se trata de unas obras que no tienen nada que ver con dicho Ayuntamiento. En concreto, se trata de las obras del proyecto de concentración parcelaria llevadas a cabo por la Consejería de Agricultura de la Junta de Castilla y León.
Al respecto, desde la Fraternidad Iternacional del Camino de Santiago recordaron que en Castilla y León la Ruta ya ha sido objeto de otros problemas como el hormigonado en Redecilla del Camino (Burgos) o la desaparición de tramos en la zona de Villares de Órbigo (León) a causa de la concentración parcelaria impulsada en los alrededores.