León para hoy contra el inmovilismo que asesina el mundo rural

Todas las organizaciones agrarias con representación en León, ayuntamientos como Valencia de Don Juan y Hospital de Órbigo, la Federación Leonesa de Entidades Locales Menores, los colectivos de mujeres rurales, sindicatos y los partidos políticos de UPL, Izquierda Unida y Podemos se fueron sumando a lo largo de la jornada de ayer a la convocatoria ‘Yo paro por mi pueblo’, organizada por la Coordinadora por la España Vaciada para reclamar un pacto nacional que defienda el equilibrio territorial. A falta de una plataforma que congregue a todas las tendencias, como ocurre en provincias como Soria o Teruel, en León las adhesiones han sido más dispersas, después de que los Grupos de Acción Local de Montañas del Teleno y Adescas anunciaran el pasado miércoles su apoyo a la iniciativa.

Será un paro testimonial de cinco minutos, entre las 12.00 y las 12.05 horas, para dar visibilidad a la situación que soportan cada día los millones de personas que residen en el mundo rural en manifiesta desventaja frente a los territorios más poblados. Las concentraciones tendrán lugar a las puertas de los centros de trabajo, en las plazas de los pueblos, en los centros educativos, en cualquier lugar donde haya población decidida a reivindicar esta causa.

Entre los argumentos que se escucharon ayer en la adhesión a la convocatoria figuran los de Asaja León, que en un comunicado reclamó políticos «con verdadera vocación agraria y ruralista para defender en las instituciones políticas dotadas de presupuesto que acometan los problemas que han llevado, a un ritmo galopante, al vaciamiento de los pueblos, siendo la provincia de León una de las más afectadas».

Por su parte, Ugal-UPA y la Asociación de Mujeres Leonesas del Medio Rural (Amulemer) recordaron que «todos los expertos señalan a las mujeres rurales y a los profesionales de la agricultura familiar como llaves para asegurar el futuro del mundo rural, pero también somos dos de los grupos sociales más denostados y esto tiene que cambiar».

En Valencia de Don Juan, su alcalde, Juan Pablo Regadera, afirmó en un comunicado que «tenemos la oportunidad y la responsabilidad de defender el derecho de todos los que hemos nacido o vivimos en el medio rural a elegir seguir residiendo en él» y añadió que defenderá, en nombre de todos los coyantinos y de todos los habitantes de la comarca, «la necesidad de contar con las infraestructuras y servicios que nos permitan vivir en nuestros pueblos en igualdad de condiciones que todos aquellos que han decidido vivir en la ciudad».

Desde Izquierda Unida, se asegura que «es el momento de repensar nuevas fórmulas de relación entre lo rural y lo urbano y de articular nuevos mecanismos de gestión y programación de Fondos Europeos, estatales y de las propias Comunidades Autónomas, porque el abandono que sufren quienes habitan el medio rural acabará afectando al conjunto de la sociedad, rural o urbana» y en Podemos, su secretario autonómico, Pablo Fernández, apostó en su visita a Soria por firmar un Pacto de Estado para repoblar y reequilibrar el territorio, además de recordar los acuerdos pasados «huecos» y reclamó un pacto con contenido político «real», dotado con una financiación «estable, adecuada y suficiente» que permita acometer las importantes inversiones que se precisan para dar respuesta a la problemática.