La renovación del alumbrado público costará 500.000 €

DL | Redacción  

El ayuntamiento de Chozas de Abajo ha sacado a licitación el cambio del alumbrado publico de todo el municipio, cuyo proyecto y pliegos de condiciones se encuentra en la web de la Plataforma de Contratación del Estado. El presupuesto base de licitación asciende a 505.771 euros y contempla el cambio de las 1.533 farolas que existen en la actualidad, que alumbran con tecnología de vapor de sodio a nuevas lámparas led.  

Esta actuación cuenta con una subvención del Instituto para la Diversificación y ahorro de la Energía (Idae), que financia la mitad de la inversión, es decir, 252.885 euros, en el marco de proyectos que favorecen el paso a una economía baja en carbono. El plazo de presentación de ofertas es de 35 días y el periodo de ejecución, de 120 días.  

Para la adjudicación del cambio de las luminarias, el pliego de condiciones contempla la valoración de la oferta económica y las mejoras planteadas por el Ayuntamiento, que trata de aumntar en 80 los puntos de luz.  

Con el nuevo alumbrado se pasará de un consumo actual de 139.000 kilovatios por hora (kw/H) y año a 18.100 kw/h anuales, lo que supone una reducción del 87% en el consumo, dato que trasladado a costes supondrá pasar de un pago de 110.000 euros a poco más de 20.000. El ahorro de unos 90.000 euros anuales permitirá destinar este dinero a otras actuaciones, como nuevas obras en interés de los vecinos del municipio.  

La renovación tecnológica del alumbrado permitirá que las farolas estén encencidas toda la noche, en vez de apagarse a partir de la una de la madrugada, como ocurre en la actualidad. Las nuevas luminarias tendrán un mínimo de tres niveles de regularización para programar la intensidad de iluminación y cumplirán el reglamento de eficiencia energética de alumbrado exterior y la Ley 15/2010 de prevención de contaminación lumínica, además del fomento del ahorro y eficiencia energética.  

Un proyecto de 2015  

El equipo de gobierno mostró ayer su satisfacción en una nota de prensa al lograr acometer una actuación por la que apostó ya en 2015. Sin embargo, la solicitud de ayuda que se cursó entonces para esta obra fue denegada por contar el ayuntamiento con un nivel de deuda de un 136%, deuda arrastrada de anteriores años, por lo que hubo que rebajar el montante de las obligaciones municipales para optar al subsidio del Idae. El 27 de noviembre de 2017, con la deuda ya reducida «y a pesar de la abstención de los entonces concejales de la oposición», el equipo socialista aprobó el crédito necesario para optar a la subvención. «Tras más un año de espera», el Idae aprobó el expediente este año.