La remolacha «tiene recorrido» con Azucarera

La remolacha de León, para la azucarera de La Bañeza. Es la apuesta del presidente de la Sociedad Cooperativa General Agropecuaria (Acor), Faustino Medrano, que ayer comenzó en Villamañán las reuniones con los agricultores para preparar la asamblea general de la sociedad del mes que viene. Antes del encuentro con los socios de la provincia, Medrano señaló que el cultivo de la raíz en la provincia leonesa «tiene mucho recorrido», gracias a unos regadíos «baratos». En su opinión, parte de la superficie que los productores leoneses destinan a maíz «debiera dedicarse a remolacha».

Pero la principal cooperativa de la Comunidad autónoma no codicia el cultivo leonés, pese al incremento de la superficie contratada en León en los dos últimos años —899 hectáreas en la campaña 2018/2019 y 1.236 en la actual—. «En León había muy poca remolacha contratada —dijo Medrano en relación al último ejercicio cerrado—, un 8%, por el tema de las distancias, que son una barrera que está ahí».  

En un contexto de prórroga de las compensaciones de Europa al cultivo —ayuda asociada y Programa de Desarrollo Rural— hasta la reforma de la Política Agraria Común (PAC), la buena noticia para los cultivadores y las azucareras en la zona norte de producción es la riqueza, que situó en 17,4 grados en las entregas a la fábrica de Acor, y en unos rendimientos medios por hectárea de 110 toneladas, la cooperativa aboga por mantener sus 14.000 hectáreas contratadas para la próxima campaña, sin que vaticine un aumento del aprovisionamiento de materia prima desde León: «Aquí la apuesta es Azucarera. Si el precio sigue subiendo y se mantiene estable, puede ofrecer un precio más atractivo para el agricultor. La remolacha es un cultivo que tiene mucho recorrido en León».  

Medrano y los socios leoneses de Acor abordaron ayer el resultado del último ejercicio, en el que la compañía presenta un déficit de 13,9 millones de euros, en un contexto histórico, con la caída de los precios en los mercados internacionales a niveles sin precedentes desde que existen registros y de pésimos resultados agronómicos en España y en el conjunto de Europa.