Sector apícola
La Junta reivindica el etiquetado claro de la miel
El consejero de Agricultura recuerda la colaboración en el control y detección de enfermedades en las abejas y la red de monitorización de la avispa asiática
El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Jesús Julio Carnero, mostró el compromiso y apoyo de la Consejería al sector apícola y manifestó que seguirán destinando fondos al Plan Nacional. Además, remarcó que desde la Administración “estaremos al lado de los apicultores” para reclamar así al Ministerio la modificación de la normativa de movimientos de explotaciones apícolas. Jesús Julio Carnero se comprometió también “a exigir una defensa” ante la Comisión Europea para “un etiquetado claro” que identifique el origen de la miel.
Así lo manifestó minutos antes de participar en las XXII Jornadas Apícolas que COAG Salamanca celebra estos días en la capital. El consejero recordó que “Castilla y León es la Comunidad con mayor número de explotaciones apícolas”, con 5.145 lo que representa el 15,7 por ciento del total nacional y que genera de media al año “más de 40 millones de euros en la región” y por tanto da trabajo a más de 5.000 personas. Respecto a Salamanca, indicó la importancia de la apicultura con “un papel protagonista”, ya que esta provincia “lidera el censo de colmenas al concentrar el 62 por ciento de las existentes en la Comunidad”, que cifran en unas 272.923.
Nuevo Plan Nacional Apícola
El consejero de Agricultura avanzó que desde la Consejería se apoyará presupuestariamente el nuevo Plan Nacional Apícola 2020-2022. EN ese sentido, explicó que en la convocatoria de este año, “la Junta ha abonado 1.565.560 euros para 330 solicitudes presentadas”. Estas ayudas están cofinanciadas por el Feaga en un 50 por ciento, el Ministerio en un 25 por ciento y el 25 por ciento restante, que es aportado por la Junta de Castilla y León.
El Plan Nacional Apícola tiene como principales objetivos la mejora de la rentabilidad de las explotaciones, la profesionalización del sector, mantener un adecuado estado sanitario de las colmenas, facilitar el asentamiento y transporte a los apicultores y mejorar la competitividad del sector.
Normativa de movimientos
Por su parte, Jesús Julio Carnero, incidió en que se seguirá reclamando al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación “la modificación de la normativa de movimientos de explotaciones apícolas”. De este modo, el sector demanda esta adaptación que permitiría “garantizar jurídicamente cualquier asentamiento de colmenas”, bien sean estantes o trashumantes, como explicó y asegurar así “una convivencia entre ambos sistemas de producción”.
La modificación del Real Decreto que regula los movimientos según consideró Carnero “es necesaria”, ya que afecta a varias comunidades autónomas como Castilla y León, Extremadura y Valencia.
Origen de la miel
El consejero de Agricultura también hizo referencia a la negativa de la Comisión Europea para incluir en el etiquetado “el listado de países de los que procede la miel en orden decreciente”, en cuanto a su importancia incluyendo el porcentaje de cada uno de ellos, por ello la Consejería insta al Gobierno central a que se mantenga “firme” en su petición.
Asimismo, dijo que si se eliminan los porcentajes y solo se mantienen los países de procedencia “se puede inducir a error al consumidor” y por tanto “puede penalizar a aquellos productores que apuestan por la miel nacional de calidad”.
Apoyo al control y detección de enfermedades
Respecto al programa piloto de vigilancia de las enfermedades de las abejas, que la Consejería mantiene con recursos propios, la detección y control temprano de estas enfermedades, especialmente la varroa, que constituye uno de los temas principales de este Congreso de Coag, Jesús Julio Carnero sostuvo que “es fundamental” para que las explotaciones apícolas mantengan un nivel sanitario óptimo y puedan seguir siendo competitivas.
Por su parte, la Junta, consciente de la importancia de reducir la mortalidad que producen estas enfermedades, pone a disposición del sector una herramienta fundamental para la detección temprana de estas enfermedades. Así señalaron que en los últimos cinco años se destinaron a este plan de vigilancia más de 85.000 euros.
Avispa asiática
Desde la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, su representante remarcó que tiene establecida una red de monitorización y vigilancia de avispa asiática que “cuenta con 158 trampas distribuidas por toda la Comunidad” y que se van moviendo estratégicamente para detectar “lo antes posible” si hay presencia de esta especie invasora.
Jesús Julio Carnero también recordó que el número de trampas ha ido aumentándose anualmente y por el contrario, el número de capturas se ha reducido en un 40 por ciento, pasando de las 1.800 avispas asiáticas recogidas en las trampas en 2018 a las 1.052 capturadas hasta la fecha en 2019.
La Junta se puso a disposición del sector para que ante la aparición de un ejemplar de avispa asiática se colabore para modificar las ubicaciones de las trampas y así detectar precozmente su presencia.