Castilla y León y Asturias «blindan» la AP-66 y la N-630 ante nuevas nevadas

La buena sintonía entre la Comunidad de Castilla y León y el Principado de Asturias quedó ayer patente en la jornada de trabajo que sus dos delegadas del Gobierno celebraron en la capital leonesa para coordinar los efectivos que participan en la campaña de vialidad invernal y evitar problemas de comunicación como los sufridos el pasado fin de semana como consecuencia del primer temporal de nieve que afectó a toda la Cordillera Cantábrica.

«De poco serviría que funcionase nuestro protocolo si no trabajáramos también coordinadamente con las comunidades autónomas limítrofes puesto que las carreteras estatales de nuestra comunidad autónoma no empiezan ni terminan en Castilla y León, Afirmó la delegada de Castilla y León, Mercedes Martín. En la misma línea se expresó Delia Losa, que afirmó que «para Asturias es vital tener una buena coordinación con la Delegación del Gobierno de Castilla y León, porque León es nuestra vía de salida a la Meseta».  

Así, se han analizado las particularidades de las carreteras que enlazan ambas comunidades como es el caso de la AP-66, la autopista de la Ruta de la Plata, que ronda los 9.250 vehículos diarios de los cuales más de 1.300 son camiones, y la N-630 , que alcanza los 2.700 vehículos diarios. Los puntos más conflictivos de ambas carreteras cuando se producen nevadas se encuentran entre los kilómetros 87 y 120. Son el túnel del Negrón II, en la AP-66, y entre el Puerto de Pajares y La Robla de la N-630.  

También se habló de la N-625, entre Mansilla de las Mulas, en León, y Arriondas, en Asturias. Esta carretera tiene su punto más conflictivo en invierno en el Puerto del Pontón, en la zona del límite de ambas comunidades autónomas. Esto es, entre los puntos kilométricos 91 y 130. La IMD de esta carretera está en torno a los 780 vehículos diarios.  

Puntos de embolsamiento  

Durante el encuentro, las delegadas del Gobierno también analizaron la existencia de puntos de embolsamientos para camiones y autobuses en caso de nevadas intensas. En Castilla y León hay 622 puntos de este tipo, de los cuales 76 se encuentran en zonas estratégicas de la provincia de León. Al respecto, Martín subrayó la importancia de la coordinación entre los efectivos de Tráfico de la Guardia Civil de ambos territorios y entre las demarcaciones de carreteras del Estado, a través de las empresas concesionarias, a la hora de adoptar una decisión de este tipo.  

Por ello, la reunión también contó con la presencia de los responsables de la Guardia Civil, de la la Dirección General de Tráfico (DGT), de las demarcaciones de Carreteras del Estado y de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), cuyos datos permiten activar los distintos niveles en función del riesgo. Además, las delegadas, que apelaron a la responsabilidad de los conductores para no utilizar el coche en estas situaciones, destacaron la importancia de «mantener en todo momento bien informado al ciudadano de las previsiones meteorológicas y del estado de las carreteras», a través de medios como el teléfono 011, la web infocar.dgt.es o la aplicación gratuita de la DGT.  

Martín destacó el trabajo de unos 3.000 profesionales, entre las Demarcaciones de Carreteras, la DGT, la Guardia Civil de Tráfico, Protección Civil, la Aemet y la UME, preparados para afrontar estos fenómenos invernales.  

Igualmente, señaló que el Estado dispone de 413 máquinas quitanieves, 174 estaciones meteorológicas, silos y depósitos para 86.000 toneladas de sal, depósitos para 4,7 millones de litros de salmuera y 72 plantas para fabricar esta concentración de sal y agua, con los que mantener limpios los 5.600 kilómetros de carreteras estatales de la Comunidad, de los que 2.400 son autovías y autopistas y 3.200 son vías convencionales.