Un valle minado de pozos abandonados

A lo largo de las últimas semanas se han ido descubriendo poco a poco, a través de los servicios municipales de Sabero y de los avisos de los vecinos numerosos socavones en el terreno. La mayor parte de los pozos se encuentran ubicados en las localidades de Olleros de Sabero, donde hay cuatro; dos en Sotillos de Sabero y uno en el linde con la localidad de Felechas.

Algunos de ellos han surgido en sitios lógicos que parecen coincidir con las galerías mineras que inundan el valle de Sabero. Otros han aparecido en lugares que la mayoría de los vecinos desconocían, pero cuyo origen parece ser el mismo.

El último, hasta el momento, en días pasados, de grandes dimensiones, en el que bien podría entrar un niño como el que aparece en la imagen. La profundidad, en la mayoría de los casos, no se puede apreciar con detalle, pero en casi todos es suficiente para que cualquier día pase una desgracia, por su cercanía, en muchos casos, de las viviendas. Si no ha ocurrido ha sido porque el Ayuntamiento ante el descubrimiento o el aviso vecinal está actuando con rapidez señalando la zona y cerrando el agujero de forma provisional con grandes piedras y escombro.

Actualmente, se está a la espera de la actuación de la Junta de Castilla y León y de la empresa titular de las explotaciones mineras ‘Hulleras de Sabero’. Desde el Consistorio señalan que «en el momento que nos hemos enterado procedimos a comunicarlo a la Junta con indicación de las coordenadas de ubicación, así como a la empresa minera, pero mientras tanto decidimos taparlos con nuestros medios, aunque fuera de forma provisional».

El Ayuntamiento, en sus escritos, hacía ver el peligro para los viandantes, para quienes practiquen algún tipo de deporte como el senderismo o la mountain-bike; además presentan un alto riesgo de accidente para las patrullas rurales y el servicio de Protección de la Naturaleza, así como para cazadores y trabajadores del campo que transitan por los lugares en los que se localizan los pozos, muchos de ellos no muy alejados de las viviendas.

Desde el Ayuntamiento de Sabero también señalan que «esta es una prueba más de que la minería y sus consecuencias, en este caso medioambientales, sigue muy presente en esta cuenca y son más necesarias que nunca medidas de apoyo y planes justos de transición, todo lo contrario a lo que se pretende sacando a este municipio de los nuevos planes del gobierno para los municipios mineros».