Campo
León pierde casi cinco mil hectáreas de montes con certificado de gestión forestal
De las 100.930 hectáreas declaradas en 2018 ha pasado a las 95.973 en 2019, según los últimos planes de ordenación
León ha perdido un total de 4.957 hectáreas de montes con sello de gestión forestal, según se desprende del último informe de PEFC, que certifica anualmente la Gestión Forestal Sostenible en Castilla y León. De las 100.930 certificadas en 2018 ha pasado en 2019 a contar con 95.973, lo que desde el Servicio de Gestión y Restauración forestal, consideran «normal dentro de una tendencia general al alza pero con sus oscilaciones». No hay que olvidar que la provincia empezó con 60.290 hectáreas hace diez años.
Según explican fuentes de este servicio, en Castilla y León, que actualmente cuenta con 746.411,12 hectáreas certificadas, hay unas 6.000 hectáreas más que en 2019. «Algunas provincias han subido más y algunas han bajado algo, lo que obedece a los planes de ordenación que causan baja en el sistema porque llevan años sin renovarse y pierden vigencia». Por este motivo, desde la Consejería de Fomento y Medio Ambiente se hacen nuevos certificados y se renovamos otros continuamente, «pero algún año son más las bajas que las altas en alguna provincia», explican.
En concreto, en la provincia de León este año causan baja y 1.400 hectáreas que causan, la gran mayoría, 1.240 corresponden al monte de Orallo. En cambio hay otros 840 que causan alta, la mayor parte, 820, de un monte patrimonial de la Junta Vecinal de Losada en Bembibre.
A la cabeza en España
La semana pasada, PEFC celebró su auditoría anual, centrada en esta ocasión en las provincias de León y Zamora. El resultado ha sido favorable, lo que permite sacar al mercado productos con el sello PEFC, que garantiza a los consumidores la procedencia de bosques gestionados con criterios de sostenibilidad.
La auditoría acredita que hasta el año que viene los montes de Castilla y León adheridos a este sistema de carácter voluntario podrán beneficiarse de que sus productos salgan al mercado con el sello PEFC, que garantiza a los consumidores que los productos que consumen proceden de bosques cuya gestión es respetuosa con los valores de conservación y mejora de los mismos, de forma que se asegura su persistencia para las generaciones venideras.
El sello PEFC ha evaluado la gestión forestal que se lleva a cabo en cuatro Unidades de Gestión Forestal, dos en cada provincia. Además de otros montes de menor relevancia, en Zamora se ha analizado un Grupo Ordenado de Montes con gran extensión superficial (4.501,91 hectáreas), y en León, un monte emblemático también de gran dimensión, el Valdesamario, con 4.955,31 hectáreas.
El examen se ha desarrollado este año con medios telemáticos como consecuencia de la declaración del estado de alarma por la Covid-19 y con el empleo de las nuevas tecnologías, con la sustitución de las visitas de campo por el uso de herramientas de Sistemas de Información Geográfica e información gráfica y digital reciente de las Unidades de Gestión Forestal, lo que ha permitido constatar que se lleva a cabo una gestión en los montes de Castilla y León muy acorde con los avances tecnológicos existentes en la actualidad.
Hasta el año que viene, en que se realizará una auditoría de revisión, se van a poder beneficiar de este sello de calidad en la gestión 746.411,12 hectáreas de montes en Castilla y León, que representan el 25 % de la superficie forestal arbolada total de la Comunidad (2.982.318 hectáreas), justo el doble de la media nacional, que se sitúa en el 12,5 %, y el 80,5 % de la superficie ordenada total existente en Castilla y León (927.441 hectáreas).
La Comunidad sigue siendo la autonomía que más superficie aporta a la certificación forestal por el sistema PEFC a escala nacional, siendo su aportación el 32,5 % del total de la superficie PEFC certificada en España (2.299.352 hectáreas).
En torno al 93 % de la superficie certificada es aportada por los montes gestionados directamente por la Consejería de Fomento y Medio Ambiente (montes de utilidad pública y consorciados) y el resto, el 7 % de la superficie certificada, es aportada por otros propietarios, tanto de titularidad pública como privada. Del conjunto de montes gestionados por la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, más del 50 % de la superficie arbolada se encuentra certificada