Entrevista | Juan Pablo Regadera
«Hemos destinado 200.000 euros a ayudas para que nadie se quede atrás ahora»
Alcalde de Valencia de Don Juan
El alcalde de Valencia de Don Juan, Juan Pablo Regadera, repasa la actualidad del municipio con la palabra prudencia como eje de cualquier decisión en la situación actual.
—¿Cómo ha vivido esta crisis el municipio y la comarca y cómo está saliendo de ella?
—Pues con mucha intensidad. Ha sido una situación que nadie, ni por lo más remoto, podía pensar que se podía encontrar con ella. Nadie tenía el manual para poder hacer frente a esta situación. Todo lo que hemos hecho es intentar ayudar a nuestros ciudadanos intentando ser lo más solidarios posible, aportando sentido común y velando por el cumplimiento de las normas que nos marcaba el mando único. La evolución ha sido satisfactoria. No nos podemos quejar comparando con otras zonas. Hemos sido menos castigados.
—¿Ha habido fallecidos?
—Ha habido fallecidos pero no sabemos el número exacto porque los datos que facilitan las autoridades se refieren al área de salud.
—¿Valencia de Don Juan se ha visto muy afectada económicamente?
—A las grandes empresas no les ha afectado de una manera relevante. Únicamente nos consta que haya habido Erte en una de ellas, en Garnica. A nuestro tejido primordial que son las pymes, micropymes y autónomos, lógicamente les ha afectado como en una buena parte de los municipios del medio rural. No podemos olvidar que aquí el comercio y la hostelería son sectores de referencia. Y, por tanto, han sido unos de los más afectados y ahora, precisamente, es cuando nos toca estar de su lado para intentar ayudarles a paliar los efectos negativos que han tenido estos tres meses.
—¿Qué medidas ha tomado el Ayuntamiento?
—Las primeras fueron dirigidas a ayudar a los más desfavorecidos en ese momento en el que había que estar confinado en casa como eran las personas mayores, personas de alta vulnerabilidad. Se puso en marcha el servicio de ayuda para la compra de medicamentos y de alimentos. Las medidas relevantes,ya en materia económica, están ya definidas en tramitación con la Junta de Castilla y León, que tiene que autorizar el ejercicio de una competencia que es impropia por parte de una administración local. Hemos destinado 200.000 euros que hemos transferido de las partidas de Fiestas, de Ferias y de Personal. Pensamos que en este momento es prioritario que nadie se quede atrás.
—¿Cómo se van a estructurar?
—Tendremos dos vías de actuación. Por un lado un programa de ayudas a autónomos y a micropymes que hayan tenido cese de la actividad o una caída de los ingresos de un 75% con respecto al periodo de normalidad. Y otro programa de ayudas destinadas a aquellas personas que ha sido objeto de Erte o que se ha quedado alguno de los miembros de la familia en paro para que puedan hacer frente a sus gastos corrientes.
—¿Alguna más?
—También vamos a suspender temporalmente la ordenanza de terrazas y ocupación de vía pública, bonificar parcialmente las tasas de agua, el coste de las escuelas de música y deportivas, y aumentar las ayudas para material escolar de cara al próximo curso para las familias más vulnerables.
—Está el verano ya aquí y la Junta acaba de anunciar que quedan suspendidas todas las fiestas locales y eventos que supongan acumulación de público.
—Nos parece una solución prudente y solidaria con la que estamos de acuerdo.
—Eso supone que quedan suspendidas todas las actividades habituales de estos meses de verano y las fiestas de septiembre.
—Sí, no puede ser de otra manera. Eso no quita que ya estemos trabajando en organizar algún tipo de actividad que sí encaje en la nueva normativa. El verano en Valencia de Don Juan, como sabemos, aglutina muchísimos visitantes. La prudencia tiene que ser nuestra mejor compañera de viaje y pensar en eventos en los que se producen llegadas masivas de visitantes en unos espacios relativamente reducidos, evidentemente, a nadie se le pasa por la cabeza. Es mejor ser prudentes y acabar con el virus y así disfrutar de un próximo verano ya con absoluta normalidad.
—Respecto a las piscinas sí que se ha decidido abrirlas.
—Sí, con unas condiciones de seguridad también extremas que, ojalá, podamos ir suavizando. Habrá una reducción del aforo que estamos barajando en 2.000 personas.
—Hay otros temas que eran objetivos del mandato como la municipalización de la limpieza.
—Está en marcha, Está aprobada en pleno la gestión directa con la abstención de la oposición. Ya estamos trabajando en las bases tanto para la licitación de la compra de la maquinaria como para la contratación del personal. Creo que en septiembre u octubre ya podríamos estar en condiciones de comenzar a prestar el servicio de manera directa, con lo que estoy muy satisfecho con que en un tiempo tan corto hayamos sido capaces de sacar adelante la municipalización del servicio.
—¿Cómo esta el asunto de la RPT (Relación de Puestos de Trabajo)?
—Era otro de los asuntos que consideramos prioritarios al inicio de la legislatura y estamos satisfechos de poder haber llevado a cabo el proceso dentro del primer año. Hay un acuerdo ya inicial en la mesa de negociación, acuerdo con el 100% de la representación sindical.
—¿Cuántos trabajadores tiene el Ayuntamiento?
—Unos cien aproximadamente. Después de doce años vamos a tener uno de los instrumentos fundamentales en la gestión laboral municipal que es la RPT, con la consiguiente valoración de los mismos. Y también ya tenemos las líneas maestras que van a regir el proceso de estabilización y consolidación de los puestos de trabajo de tal manera que logremos reducir de una manera muy relevante la temporalidad que está en más del 85% y que tenemos que reducir de una manera drástica siguiendo las directrices de la Unión Europea. Tenemos que reducirla al 8%.
—¿Alguna reivindicación a las administraciones superiores?
—Hemos demostrado en el medio rural en estos meses que somos un enclave privilegiado para poder vivir. Y como queremos vivir aquí, queremos también poder trabajar en el medio rural. Hemos demostrado que en momentos en los que ha primado el teletrabajo el medio rural ha sido un sitio extraordinario para poder hacerlo. ¿Por qué no extender este método en el futuro, en esa nueva normalidad en la que nos adentramos? A la administración le tenemos que pedir medios para que podamos seguir viviendo con una buena calidad de vida en el medio rural y poder seguir trabajando.
—¿Qué medios serían imprescindibles?
—Una red de banda ancha suficiente que nos permita tanto teletrabajar como implantar industrias que pudieran utilizar, precisamente, esa infraestructura. ¿Por qué no podemos ser uno de los sitios donde desarrollar tecnología? Yo creo que es posible. Hoy con el 5G sería perfectamente factible.