La restauración del castillo, orgullo de todo un pueblo

Pocos podían imaginar cuando aquel 10 de marzo de 2018 tras oír un gran estruendo los vecinos de Alcuetas comprobaron que su castillo, emblema de la localidad, se había venido abajo y había quedado convertido en un montón de escombros.

Han pasado algo más de dos años y varios meses de trabajos y hoy, terminadas las obras, la fortaleza, del siglo XVI, luce en todo su esplendor. Incluso más señorial e imponente que antes del derrumbe.

El edificio ha sido restaurado en toda su integridad gracias a una inversión de 200.000 euros financiados al 75% por la Diputación de León con cargo a la línea de ayudas para la Recuperación, Conservación, Restauración y Rehabilitación de Patrimonio Histórico Artístico de la provincia. Se han rehabilitado todos los muros con una facha este espectacular, pero también los dinteles y pasos de puertas, ventanas, la cúpula de uno de sus cubos...

«La empresa Decolesa ha hecho un trabajo excepcional», afirma el alcalde Villabraz, Ricardo Pellitero, municipio al que pertenece la pedanía de Alcuetas.

El castillo de Alcuetas es una fortaleza que data del siglo XVI, declarada Bien de Interés Cultural (BIC) desde 1949. Es un edificio de pequeñas dimensiones pero de gran belleza, construido por Alfonso Enríquez de Acuña, hijo de Juan de Acuña y Portugal, tercer conde y segundo duque de Valencia de Don Juan, y Teresa Enríquez.

El alcalde pide un último esfuerzo a las administraciones, principalmente a la Diputación de León para terminar de acondicionar el entorno y dotarlo de algún tipo de cerramiento que permitiese convertirlo en un espacio cultural que podría albergar una sala de conferencias y otra de exposiciones o pequeño museo. Es tal la satisfacción de los vecinos de la localidad, cuenta Pellitero, con las obras realizadas «que estarían dispuestos a aportar una pequeña parte del dinero para acabar su rehabilitación».