Las restauraciones mineras se financiarán con 150 M€ del Plan de Recuperación

Las restauraciones de la Gran Corta de Fabero y de Villagatón serán las dos primeras actuaciones en espacios degradados por la minería que emprenderá el Instituto para la Transición Justa (ITJ), según fuentes del organismo, que aseguran que los planes de restauración tienen consignados 150 millones de euros para el próximo año con cargo al Plan de Recuperación. Ambas restauraciones tendrán una repercusión importante en el empleo de las zonas, según dichas fuentes, que añaden que al ser competencia de las comunidades autónomas, se habilitarán marcos de colaboración para agilizar lo más posible la tramitación de los proyectos.

A estas inversiones se añaden, también dentro del Plan de Recuperación, un fondo de 17 millones de euros para un marco de empleabilidad dirigido especialmente a los trabajadores excedentes de la minería, con el que también se pretende facilitar el acceso al mundo laboral de otros colectivos de las cuencas, como mujeres y jóvenes. La inversión se destinará a realizar un exhaustivo plan de formación y capacitación de cara a encontrar un trabajo sostenible con vocación de continuidad.

El Instituto para la Transición Justa también ha anunciado una tercera línea de actuación con 110 millones de euros para acometer infraestructuras municipales, un plan que se abordará con una consulta previa con los ayuntamientos de las zonas mineras para conocer de primera mano cuáles son sus necesidades prioritarias.

La Ciuden también recibirá fondos procedentes del Plan de Recuperación para sus labores de investigación, aunque el volumen de la inversión se avanzará en el Patronato que se celebrará en los próximos días.

El instituto, que valora de forma muy positiva la aprobación esta semana en Europa del Fondo de Transición Justa, dotado con 17.500 millones de euros, asegura que la llegada de estas ayudas europeas permitirá actuar a largo plazo en las zonas mineras para consolidar las políticas de transición a una economía verde. A este respecto, los responsables del ITJ remarcaron que las cuencas serán territorios prioritarios para acoger los nuevos proyectos energéticos relacionados con el hidrógeno o el almacenamiento de energía. Desde el ITJ se refirieron a la problemática de compaginar la actuación a corto plazo tan necesaria en las comarcas mineras, que ya no tienen actividad relacionada por la minería y la generación eléctrica por carbón, con las políticas a medio y largo plazo para asentar población y crear empleo. Para ello, aseguran que se buscarán mecanismos que permitan agilizar las inversiones, que se consensuarán y adaptarán a las singularidades de cada territorio y que pretenden llegar a todos los municipios, incluidos los más pequeños.

También se refirieron a la situación de los trabajadores excedentes de la minería, para los que buscarán una solución definitiva que abordarán el próximo martes con los agentes sociales.