Adiós a un símbolo minero
El economato pasa a ser historia
Tras la demolición en la noche del viernes, el solar será ocupado por un nuevo vial de acceso al centro de salud y correos de Cistierna
El Ayuntamiento de Cistierna procedió en la noche del viernes al sábado al derribo del antiguo economato minero de Hulleras de Sabero y Anexas S. A. Ese era el acuerdo y autorización que tenía con la empresa Adif dado que el derribo afecta a la línea ferroviaria León-Bilbao. Para ello se disponía desde las once de la noche a las seis de la mañana para proceder a derribar estas instalaciones que contaban con tres edificaciones contiguas y paralelas a la vía ferroviaria con una longitud de cinco metros y una distancia de cinco metros a las vías. La instalaciones ocupaban un total de 482 metros cuadrados.
Este edificio llevaba en desuso desde 1991 y estaba vacío en su interior. Además con el paso de los años como consecuencia de los temporales de nieve y lluvia se ha visto muy dañado. Actualmente la parte del edificio que se correspondía con la zona de la tienda del economato tienen el tejado hundido y lo mismo pasa en la parte trasera del edificio. Esto hace que sea un peligro ya que amenaza con hundirse. Más de 70% de tejado se encuentra hundido
En estado de ruina
El pleno del Ayuntamiento de Cistierna en abril de 2013 había aceptado la cesión gratuita por parte de la empresa Hulleras de Sabero y Anexas de los edificios que conforman el antiguo economato de esta empresa situado en la calle Padre Isla. Recordaba entonces el alcalde de Cistierna, Nicanor Sen que desde hacía tiempo se venía poniendo en conocimiento de la empresa Hulleras de Sabero el estado de ruina en el cual se encuentra esta instalación. «Lo que pretendemos es llevar a cabo lo estipulado en las normas subsidiarias que es la construcción de un nuevo vial tras derruir el antiguo economato», aseguró Sen.
La construcción de la nueva calle, paralela a las vías del Feve, uniría la calle Padre Isla con la calle Donantes de Sangre lo que permitirá dar salida al centro de salud de Cistierna y a las oficinas de Correos. «La nueva calle beneficiará a los vecinos que viven en los barrios de La Chimenea y santa Bárbara, ofreciéndoles una nueva salida y entrada mucho más ancha y facilitando el acceso de todos los vecinos hacia el ambulatorio de Cistierna», concluyó.
Preparativos previos a los derribos del economato. CAMPOS