VILLADEMOR
El Carro Triunfante protagoniza la fiesta
Como todos los años, los vecinos de la localidad acompañaron en procesión al Carro Triunfante. Fiesta, fe y música se conjugaron en la mañana de ayer. Una comida popular en las bodegas puso el punto final a las fiestas de este año.
Sobre una alfombra de pétalos de rosas, y con el suave aroma de ramas de otras muchas flores, el Carro Triunfante, volvió a recorrer las principales calles de Villademor en la procesión que se realiza el día de la fiesta grande, durante las fiestas del Señor. Las ventanas y casas vistieron sus mejores galas, con mantones y colchas, para que al paso del Carro Triunfante portando la Custodia con el Santísimo Sacramento, todo estuviera lo más bello posible. La despoblación, uno de los mayores problemas que sacuden a estos pueblos, afecto a esta procesión, que antaño lucía a los niños y niñas de comunión, y a los bebés para bendecir. Hoy no hay bebés y tan solo una niña de comunión acompañaba al Carro lanzaban pétalos de rosa. Por calles embarradas La procesión del Carro Triunfante es una de la más antiguas que se hacen en la provincia, única en su originalidad, ya que no hay constancia de uso de un conjunto escultórico como este Carro en ninguna otra procesión de la comarca ni de la provincia. Aunque no hay datos exactos que releven la fecha de construcción del original Carro, si que se ha podido comprobar que se remonta al siglo XVII. Su paso por las calles de la localidad, se lleva haciendo desde entonces. Los más viejos del lugar aseguran que solo en dos ocasiones no pudo hacerse la procesión, y nunca fueron por causa del pueblo, siempre se ha respetado el itinerario del carro, Incluso cuentan que el «Carro Triunfante» llegó a pasar por calles sin asfaltar, embarradas por efecto de la lluvia, con la dificultad que esto conlleva. Las fiestas continuó por la tarde con la actuación del grupo de bailes regionales de la localidad. Y por la noche durante la celebración del baile, se sortearon un aspirador, jamón y un lomo. Hoy las fiestas ponen punto final con una gran fiesta en las bodegas, a las 19:00 horas, donde se podrá disfrutar de una gran parrillada y espiche de sidra de Lagar, siempre acompañados de la mejor música para que no decaiga la fiesta. Después, y como colofón a la fiesta, un año más se procederá a soltar el cochinillo engrasado, que supone una espectacular carrera para conseguir tan preciado premio.