Cientos de romeros arroparon a la Virgen

La fiesta en honor a la Virgen de Camposagrado se inició a primeras horas de la mañana con el campeonato de León para mastín español, que centró la atención de numerosas personas. A lo largo de la mañana, cientos de vehículos se fueron acercando al santuario, aunque no se produjeron serios problemas de circulación, gracias al eficaz trabajo de la Guardia Civil de Tráfico. Pasadas las diez y media de la mañana, comenzó la segunda edición de los juegos tradicionales y populares, así como los deportes autóctonos. A esta edición no faltaron el bolo leonés, la monterilla, la petanca, la calva, la tarusa, la rana y sogatira entre otros. Al mediodía y, cuando los romeros empezaban a programar la jornada, tenía lugar uno de los actos centrales de la romería de Camposagrado: el desfile y la procesión de los grupos folklóricos presentes en el evento. Sin embargo, la salida de la imagen de la Virgen de Camposagrado del santuario que la cobija fue el momento en el que se vivieron con gran devoción. La Virgen fue llevada a hombros, como marca la tradición. Fiesta popular Finalizada la procesión y antes del inicio de la celebración litúrgica, se leyó el pregón de la exaltación de la romería de Camposagrado, que un año más fue elaborado por el abad de San Isidoro, Antonio Viñayo, que aunque no estuvo presente, uno de los once sacerdotes que concelebraban la eucaristía, dio lectura al mismo. En el texto, Antonio Viñayo resaltó que «por primera vez, los blasones de cada uno de los tres municipios convocantes de la rogativa-romería, Cuadros, Rioseco y Carrocera, ennoblecen el programa anunciador de los festejos. Además, son heraldos de la glorias de cada comarca, signos de identificación de cada lugar, el apelativo personalizado de tierras y solares. Carrocera y sus picos cruzados de minería, Cuadros y sus jaqueles, Rioseco y sus fortalezas. Tres escudos de otros tantos ayuntamientos de la romería, que agrupan las singularidades de nuestro solar». La fiesta continuó con la celebración de los juegos populares, la exaltación del folklore leonés, el corro de lucha leonesa y el concierto a cargo de la Escuela Leonesa de Acordeones. En definitiva, una tradicional romería, que cada año congrega en esta localidad a más devotos, que acuden de toda la provincia leonesa, Galicia o Asturias.