Un autobús de Gijón con familiares visitará la fosa
La expectación que despiertan las excavaciones que se están llevando a cabo en las inmediaciones de Piedrafita de Babia para intentar recuperar los cuerpos de 37 republicanos fusilados la noche del 5 de noviembre de 1937, ha levantado una gran expectación entre vecinos del entorno, medios de comunicación, y sobre todo familiares de desaparecidos durante la Guerra Civil española, residentes en otros puntos del país. Una vez hallados los primeros restos óseos que confirman la ubicación de la fosa común en la zona de laboreo, se ha prescindido de la ayuda mecánica, y desde ayer las excavaciones se mantienen de forma manual, para no dañar los huesos que puedan ir apareciendo a partir de ahora. Uno de los voluntarios desenterró ayer el primer cráneo de los que se supone que permanecen enterrados en esta zona, y los técnicos creen que en este entorno pueden encontrarse los cadáveres. Y mientras, continúan las tareas de destierre, se multiplican las visitas de familiares que acuden a la zona confiando en poder rescatar los restos que hasta ahora no han podido enterrar con dignidad. Aquí se cree que está enterrado el padre de un guardia civil retirado de Oviedo, cuya familia está pendiente del resultado de la excavación. Los responsables de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica, que han organizado esta excavación, han recibido además la información de que familiares de desaparecidos durante la Guerra Civil que viven en Gijón, van a contratar un autobús para visitar la zona, mientras se conocen mas datos sobre la identidad de los posibles cadáveres que se intentan exhumar en este campo internacional de trabajo. Al parecer, entre los fusilados estaban José Amor y Manuel Alvarez, ambos vecinos de la localidad de Caboalles de Abajo, además de otros dos vecinos de Orallo, dos mujeres de Villager de Laciana, y otros fallecidos procedentes de otras zonas. Cada día aparecen mas indicios de lo ocurrido la noche del 5 de noviembre de 1937, que permitirán facilitar los trabajos de identificar los cadáveres, una vez sean exhumados.