TEO construirá una planta de bioetanol en Benavente
La cooperativa Tera-Esla-Orbigo (TEO), con sede en la localidad zamorana de Benavente y cuya actividad se extiende por el sur de la provincia de León, está promoviendo un proyecto para construir una planta de bioetanol en la que se invertirán 72 millones de euros (12.000 millones de pesetas) para crear biocombustibles a partir de cultivos tradicionales de la zona. La planta, que generará unos doscientos puestos de trabajo directos y otros quinientos indirectos, pretende compensar la pérdida de puestos de trabajo que ocasionaría el posible cierre de la azucarera de la comarca, ubicada en Villanueva de Azoague, cerca de Benavente, explicó ayer el gerente de la cooperativa, Ángel Cachón. Además, el proyecto de la planta de bioetanol, que sería el segundo de este tipo en la comunidad autónoma de Castilla y León, busca promocionar cultivos tradicionales de la zona, como el trigo, la cebada y el maíz, de los que actualmente hay excedentes de producción y se paga un precio muy bajo. La utilización de estos cultivos para obtener combustibles renovables, especialmente en el caso del maíz por contener mayor cantidad de almidón, haría que se revalorizasen y la producción se pagase a «precios muy rentables» para el agricultor, según aseguró Cachón. El proyecto, en el que podrán participar los 13.000 socios de Castilla y León de las cooperativas TEO, Calporc y Corecal, cuenta con el apoyo de la empresa catalana Suris, que ya ha puesto en marcha plantas similares a la que se proyecta para Benavente en Canadá y en los Estados Unidos. La factoría se ubicará en una parcela que cuenta con una superficie de diez hectáreas aún no determinada, ya que tres ayuntamientos de la comarca benaventana: Villabrázaro, Micereces de Tera y San Cristóbal de Entreviñas, han ofrecido terrenos para acoger esta industria en sus términos municipales. Los promotores de la iniciativa confiaron en obtener el 50 por ciento de la inversión necesaria de subvenciones públicas, para lo que ya tienen el respaldo del Ministerio de Economía y la Junta de Castilla y León, según el gerente. Asimismo, la entidad financiera Caja Duero mostró su disposición a participar en el proyecto y se mantienen contactos con otras entidades bancarias para que se sumen a la iniciativa, para cuya puesta en marcha aún no se han concretado plazos, aunque la intención es iniciar la construcción de la planta de bioetanol lo antes posible. La otra planta de este tipo en la comunidad está previsto que se construya cerca de Salamanca, precisamente por parte de la empresa Ebro Puleva, que posee la azucarera de Benavente.