De las 18.917 hectáreas quemadas hasta agosto del 2000, se ha pasado a 812 hectáreas este año
Los daños del fuego en León han descendido un 95% en dos años
Los datos de la lucha contra el fuego de este año no pueden ser mejores, comparados con las estadísticas de los pasados años. Si el año pasado ya se lo
Los datos de la campaña de incendios de este año está resultando mejores que nunca. Tanto el número de incendios como el de hectáreas quemadas ha descendido considerablemente en relación a años anteriores. En lo que llevamos de año, se han producido en la provincia 412 incendios, que han quemado 812 hectáreas. En el mismo periodo de tiempo de año pasado, habían ardido en León 2.942 hectáreas (1.130 más), y hace dos años la cifra de hectáreas quemadas se había disparado hasta las 18.917. En cuanto a porcentajes, en relación con los daños producidos en el 2001, este año ha bajado las hectáreas quemadas un 27%. Si la comparación se hace con relación a hace dos años, la bajada es del 95,71%. Los fuegos en el periodo estival también ha bajado notablemente en los primeros siete meses del año. Si en el 2000, se produjeron 706 incendios y el año pasado 490, este año apenas se han producido un centenar de fuegos. En el conjunto del año se han producido en la provincia 410 incendios, frente a los 648 fuegos que se produjeron entre el 1 de enero y el 27 de septiembre de 2001. Mayor concienciación En cuanto al número de incendios, la bajada también es notable en la provincia. En el 2001, se habían producido en León hasta el 15 de agosto, 648 incendios. Este año, con una semana menos, se han producido 410 focos. A pesar de estos datos, León sigue siendo la provincia que más incendios y más hectáreas ha visto ardiendo de toda la comunidad seguida, como suele ser mala costumbre en esta estadística, por Zamora. En la comunidad, también se ha producido un descenso, aunque no tan drástico como en la provincia. Mil quinientas hectáreas quemadas en 1.200 incendios es el resultado en los primeros siete meses del año, frente a los 1.698 incendios y 2.130 hectáreas quemadas del año pasado. Las causas de este descenso hay que buscarlas en una mayor concienciación de la sociedad y en las medidas de previsión instadas por la Consejería de Medio Ambiente. Además, hay que añadir que el tiempo no ha acompañado (falta de lluvias, sequía) para una mejor campaña como el año pasado, en que el invierno «invadió» la primavera y el agua cayó en mayor cantidad que este año.