El retroceso generacional es más perceptible al oeste de Pajares

Las tendencias de la población osera han sido negativas en la provincia de León. El retroceso generacional es más perceptible en el núcleo occidental, al oeste del puerto de Pajares, que en el oriental, básicamente leonés-palentino. En los estudios realizados por la Universidad de León se han recogido itinerarios fijos de búsqueda de indicios (huellas, rastros, excrementos, árboles marcados, signos de alimentación) en primavera y verano. La investigación es concluyente: la tasa de declive anual en los años 90 en el sector occidental ha sido del 4 por cien. Respecto al uso del medio, la especie ha mostrado preferencia por zonas de media y baja ladera, a menor altitud en el sector occidental (media de 1.160 metros) que en el oriental (1.290 metros de media). Su hábitat ideal El hábitat óptimo se caracteriza por macizos forestales de frondosas, muy extensos, con alta cobertura de arbolado maduro y abundancia y diversidad de especies productoras de frutos secos. Frecuentemente, los buenos enclaves del oso lindan con terrenos de suelo profundo y praderío de siega. Las plantaciones de pino tienen escaso interés para el plantígrado. Pero el principal factor perturbador de la vida del oso pardo cantábrico es el incremento de la actividad humana, a través de la construcción de pistas forestales, cuyo uso actual es más turístico y cinegético que ganadero. Otro elemento negativo, singular y localizado, es la tala de castaños en fincas particulares de valles asturianos, un recurso alimenticio básico, sin la producción de bellotas y hallucos. Los planes de recuperación del oso pardo no han logrado que la especie vuelva a la bonanza, y con un censo estimado en 50 ejemplares en el núcleo occidental y menos de una treintena en el oriental, la situación de este carnívora excepcional sigue siendo delicadísima. Los terrenos más tranquilos, necesarios para una reproducción eficaz de la especie, son cada vez menos productivos. En este sentido, Fapas ya denunció e el año 2000 que «la administración regional o adopta suficientes medidas legales para frenar el proceso de extinción de oso pardo cantábrico, en especial en las montañas de Riaño.