El fiscal pide 11 años para los siete implicados en la operación Txaciana

La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de León dejó ayer visto para sentencia el juicio contra siete acusados de integrar la principal red de venta de cocaína en Laciana, tras dos días de vista oral. El fiscal mantiene la petición de penas de 11 años de cárcel para cada uno por entender que cometieron un delito contra la salud pública. Los imputados fueron detenidos por la Guardia Civil el 31 de mayo del 2001, en una operación bautizada como Txaciana en la que se incautaron 15.000 dosis de cocaína y también se arrestó a otras catorce personas que colaboraban presuntamente con la red de narcotráfico. Según se puso de manifiesto en el juicio, el supuesto cabecilla de la organización era Hermógenes F.G., de 44 años, que utilizaba como tapadera el pub Lancelot y el club de alterne 7 y 8 de Villablino, según el atestado. El acusado fue detenido tras una persecución por carretera con dos millones de pesetas supuestamente para comprar un alijo de droga, según recordaron los agentes. F.G. negó, sin embargo, que liderara una red de narcotráfico y justificó los dos millones en beneficios de sus locales. En el banquillo se sentaron cuatro camareros que trabajaban en los locales de F.G. y que admitieron que vendían droga, pero por presión de su jefe «para mantener el puesto de trabajo». Percibían dinero por esa venta, dijeron. H.F.G. ya ha sido condenado en Galicia por un delito de coacciones y contra los derechos de los trabajadores, al forzar a prostituirse a extranjeras. Los agentes explicaron que es un hombre violento y muy temido.