Denuncian que el vaso de vertidos del CTR no tiene permiso de CHD

El presidente de la asociación Órbigo Tuerto, Alfredo Alija, denunció que el vaso de vertidos del futuro centro de tratamiento de residuos de San Román de la Vega «carece de permiso de la Confederación Hidrográfica del Duero, aunque la ley le obliga a tenerlo, como toda actividad en la que haya riesgo de contaminación», señaló. Alija citó entre los peligros que, a su juicio, puede ofrecer dicho depósito, el hecho de que «si el agua de lluvia entra en contacto con los residuos del vaso de vertidos, se producirán lixiviados». El presidente de la asociación matizó que «se ha pedido sólo autorización para la depuradora de aguas», y criticó el hecho de que «a pesar de que la ley señala que es el titular de la actividad, en este caso el consorcio, el que debe pedir los permisos, las solicitudes las está haciendo la UTE» encargada de las obras. Permisos «necesarios» Alija indicó que dichos permisos son necesarios «porque (el proyecto) invade la zona de policía de cauces; porque toda actividad susceptible de contaminar el dominio público hidráulico, en este caso las aguas subterráneas, precisa autorización administrativa; y porque el vertido en un depósito de rechazos se considera vertido por ley». Además, añadió que, en su opinión, tal autorización no ha sido solicitada «porque la ley de aguas prohibe el proyecto, porque no es autorizable hacer un agujero en un acuífero y depositar en él residuos contaminantes», dijo. Alija realizó estas declaraciones tras la emisión en La 2 el pasado domingo del espacio Línea 900, que trató la problemática del CTR junto a otros asuntos relacionados con la contaminación del agua.