Lácteos Borín lanza los primeros productos de leche de cabra en León

«El queso es patrimonio de la cultura tradicional de León, muy de las mujeres que uno no se explica cómo tenían tiempo todavía, después de las labores de casa, para hacerlo». El columnista de Diario de León, Pedro García Trapiello, homenajeaba así en su discurso de presentación a la familia Vázquez González «por tener el valor de recuperar la leche de cabra y el espíritu del mundo rural en estos tiempos que corren». A su vez, el secretario general de la Unión de Ganaderos y Agricultores de León (Ugal), Matías Llorente, destacó la importancia de la salida de los productos de esta empresa al mercado para crear un tejido industrial que permita «la pervivencia del mundo rural, lo más importante para un país aunque ahora se le tenga olvidado». Por su parte, el jefe del Servicio Territorial de Agricultura y Ganadería, Fidentino Reyero, aprovechó sus amplios conocimientos como experto en calidad láctea para felicitar al nuevo empresario y desearle un gran futuro. Por último, el director gerente de Lácteos Borín, agradeció a todos los que le han apoyado en esta empresa, que tenía planeada desde los tiempos del viejo Riaño, y, muy emocionado, le dedicó el acto de presentación a su hermana y a sus sobrinos por lo mucho que le han ayudado para conseguir su objetivo. La empresa está radicada en Valdearcos, una localidad más conocida como la Estación de Santas Martas, y la explotación es de tipo familiar. 50.000 kilos al año En total son 600 las cabras las que producen 400.000 litros de leche al año, que se convierten en 50.000 kilos de productos lácteos que se dividen en queso (frescos, curado y semicurado), yogur y cuajada. Todo elaborado de forma artesanal con leche de cabra, lo que convierte a sus productos en únicos en la provincia. Eso sí, en cada uno hay un manjar de la más alta calidad, porque la excelencia es la bandera de Lácteos Borín, según su gerente.