Las subvenciones para desarrollo rural se elevarán a 36 millones en seis años

El consejero de Agricultura, José Valín, presidió ayer en Valladolid junto al subsecretario de Agricultura, Manuel Lamela, la firma de los programas Proder y Leader Plus que beneficiarán el desarrollo rural de la mayor parte de los municipios de la comunidad. La firma supone para León la puesta en marcha de seis iniciativas europeas que permitirán invertir 36 millones de euros (5.989 millones de pesetas) en los próximos seis años. La cifra recoge el desembolso que efectuarán las administraciones públicas implicadas (la Unión Europea -a través de los fondos Feder y Feoga- y los gobiernos central, autonómico y local) en el periodo 2002-2006, fecha tope para presentar proyectos, aunque se concede un margen de dos años más para completar la ejecución de los negocios. La única condición para que los seis grupos de desarrollo rural leoneses puedan dar luz verde a las subvenciones públicas es que consigan entre un 40% y un 60% de capital privado, así que la inversión prevista en los municipios leoneses hasta el 2008 se eleva a 55 millones de euros (9.200 millones de pesetas). Todo ese esfuerzo inversor debe dejar sentadas las bases definitivas para que puedan despegar económica y demográficamente las áreas rurales más deprimidas de la provincia. Sobre todo, porque a partir del 2008 no están claros los fondos que aportará la UE a Castilla y León, que puede ver cómo se cierra el grifo de las ayudas que se reciben desde 1991. Los grupos de acción local han sido constituidos por miembros de las seis asociaciones leonesas: Asodebi (Bierzo), que accede por primera vez a la línea de ayudas, al igual que Poeda (Páramo, Órbigo y Esla), Adescas (Sahagún y parte del Sur de León), Cuatro Valles (parte de la Montaña Central y Occidental), Montañas de Teleno (Maragatería, Cabrera, Valduerna y Valdería) y Montaña de Riaño (parte de la Montaña Central y Oriental). La experiencia acumulada en una década evidencia que los programas no han resuelto problemas como la fijación de población o la incorporación de emprendedores. Sin embargo, los gerentes de las seis asociaciones son optimistas y confían en que el desarrollo rural sea un éxito, gracias a la puesta en marcha de pequeñas y medianas industrias. Marta García, de Cuatro Valles, asegura que sobre su mesa ya esperan quince solicitudes de empresas de turismo, agroalimentación y actividades de ocio. «Tenemos ya comprometidos unos 800 millones de pesetas y estamos convencidos -dice- de que lograremos doblar con capital privado los mil millones de pesetas en subvenciones públicas que se firmaron ayer».