Unidos por el patrimonio
El pueblo que quiere salvar el castillo
Los vecinos e hijos de Alcuetas deciden poner de su bolsillo el dinero que sea necesario para poder acceder a las ayudas de la Diputación
El padrón refleja que apenas 30 personas viven en Alcuetas, pero este pequeño pueblo del sur de la provincia, situado a pocos kilómetros de Valencia de Don Juan y perteneciente al municipio de Villabraz, se está convirtiendo en un símbolo en la defensa del patrimonio rural con su castillo como emblema y punta de lanza.
Gran parte de la fortaleza, del siglo XVI, se vino abajo el 10 de marzo de 2018 y, desde entonces, vecinos, junta vecinal y Ayuntamiento se conjuraron para que no cayera en el olvido y languideciera como una ruina.
El Ayuntamiento dio un paso al frente y acudió a la Diputación de León que le concedió una subvención del 75% para una inversión de 200.000 euros. El 25% restante salió de las arcas municipales. Un esfuerzo ímprobo para un municipio que no llega a los 100 habitantes que, además, tiene que distribuir sus recursos entre las otras dos pedanías que lo componen: Fáfilas y Villabraz.
Con esos 200.000 euros se obró el milagro. Se rehabilitaron los muros con una fachada este espectacular, pero también los dinteles y pasos de puertas, ventanas, interiores, el cubo del torreón... con un resultado excelente.
Pero no quieren quedarse aquí. Ahora el objetivo es levantar el muro oeste que cerraría el edificio y adaptar el interior incluso reconstruyendo el piso intermedio que le devolvería las dos plantas que tuvo en su día. La finalidad es clara: convertir a la fortaleza en un espacio cultural que podría albergar una sala de conferencias, exposiciones, teatro... en definitiva, ponerlo en valor dándole uso.
Ala este del castillo de Alcuetas, recién restaurada. MEDINA
La Diputación de León ha vuelto a sacar una línea de ayudas subvencionadas al 90% para proyectos de entre 50.000 y 300.000 euros para la rehabilitación de patrimonio. Unas subvenciones que sacan a la luz un problema para los pequeños municipios que no cuentan con los recursos económicos suficientes para hacer frente al 10% que les corresponde del coste de la obra.
Éste es el caso del Ayuntamiento de Villabraz, según confirma amargamente su alcalde, Ricardo Pellitero, que reclama a la Diputación que financie estas obras al 100% «aunque nos den menos dinero. Pero si nos obligan a poner el 10% prácticamente nos llevan a renunciar a ellas».
En este caso han encontrado una solución con una dosis de valentía fuera de lo común. El pasado 26 de diciembre se celebró un concejo en el que se decidió que sería la junta vecinal de Alcuetas, propietaria del castillo, la que solicitaría la subvención y los vecinos e hijos del pueblo aportarían ‘a escote’ lo que fuera necesario. Y no sólo eso, sino que irán a por el máximo de la ayuda, los 300.000 euros. Ya hay 70 personas apuntadas, cerca del doble de los habitantes actuales, casi nada, afirma orgulloso el alcalde. Esta vez la fuerza del pueblo por defender su emblema ha sido imparable, «pero en otra ocasión tendremos que renunciar por falta de recursos».