Un corte de calidad
El centro de la contra aumentaría un 20% la producción de la IGP Cecina de León
Una investigación del Itacyl avala que la calidad de este corte es igual a la de la pieza entera
El uso del centro de la contra podría suponer un incremento de un 20% en la producción de la IGP Cecina de León. Así lo avalan los resultados del estudio ‘El efecto del recorte de la pieza de partida en la calidad de la Cecina de León IGP, elaborada a partir de la contra’, realizado por el Instituto Tecnológico Agrario (Itacyl) en la Estación Tecnológica de la Carne de Guijuelo (Salamanca).
El resultado del estudio fue ayer presentado en Astorga en la sede de la IGP por el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de la Junta de Castilla y León en funciones, Juan Carlos Suárez-Quiñones, junto al presidente del Consejo Regulador de la IGP Cecina de León, José Luis Nieto, y el viceconsejero de Desarrollo Rural y director general del Itacyl, Jorge Llorente.
El estudio científico pretendía abordar el estudio de dos nuevas piezas: el centro de contra y el redondo. Y el resultado del mismo ha avalado la calidad del centro de contra, dejando el redondo fuera de la IGP por no presentar las características requeridas. Por tanto, el uso del centro de la contra podría suponer un incremento de un 20% en la producción de Cecina de León y la incorporación de nuevas empresas.
A la espera
Si la Comisión Europea da el visto bueno, se podrá modificar el pliego de la IGP para fabricar estas piezas
Al respecto, Suárez-Quiñones destacó que «la Cecina de León es un producto de calidad, por lo que se le exigen unas características propias y diferenciales, que se obtienen tras una rigurosa selección de la carne de partida y un cuidadoso proceso de elaboración». A la par, el consejero resaltó que «este estudio se ha desarrollado con el objetivo de adaptar las piezas de cecina a las demandas del mercado e incrementar la producción avalada por la IGP».
Por su parte, Nieto explicó que “desde el 9 de noviembre de 2018, fecha en la que tuvimos la visita de Milagros Marcos como consejera en ese momento, comprometiéndose a la realización de este estudio no se ha parado de trabajar en su elaboración”. A partir de ahí comenzó la selección de las piezas, se empezó con el proceso de elaboración de más de 7 o 10 meses y, después, se llevaron a Guijuelo donde se realizaron las diferentes pruebas y análisis hasta marzo de este 2021.
«En total fueron cinco industrias participantes, se analizaron un total de 30 piezas y cada una de las industrias aportó de dos animales diferentes dos contras, dos centros de contra y dos redondos, finalmente el estudio salió de manera óptima para el centro de contra y quedó fuera por no reunir las cualidades suficientes el redondo», detalló Nieto.
Fue en febrero de 2021 cuando el estudio quedó finalizado, llevándose a cabo en los días posteriores la solicitud de la modificación del Pliego de Condiciones para incluir el centro de contra, siendo publicado el informe positivo en el Bocyl el 25 de marzo y, ahora, la IGP Cecina de León está a la espera de que sea realizada la valoración por la Comisión Europea y pueda empezar a certificar piezas.
Colaboración público-privada
«Creemos que ha sido y es, una forma de trabajar seria, colaborando las empresas con las instituciones para mejorar y ser más productivos y poder adaptarnos a las tendencias del mercado y lo que demanda en cada momento, sin perder de vista el porqué somos una IGP», remarcó Nieto.
Por otro lado, Nieto reclamó al Ministerio de Agricultura «mayor implicación» en la lucha contra el fraude y sus imitaciones de la cecina porque «son tesoros gastronómicos que tenemos en nuestro mundo rural y hay que decirlo de una manera clara que solo la cecina de León se puede llamar a la que ha pasado unos controles de calidad».