Uno de los vecinos no declaró por presentarse en el juzgado sin DNI
Desde las 9.30 de la mañana y hasta el mediodía, las personas citadas fueron pasando a declarar por el Juzgado de Instrucción número 4 de León, excepto una que por no portar su documentación, no pudo cubrir el trámite.
Los demás fueron desgranando su punto de vista sobre las personalidades de la víctima y del acusado. En esta relación no constaban denuncias previas por malos tratos, patrón habitual en los asesinatos machistas. Sin embargo, el procesado sí tenía antecedentes policiales por violencia de género. La anterior relación del acusado duró cinco años y, cuando ella le dejó, entró en su vivienda a la fuerza y la destrozó. Su expareja le denunció y el sospechoso abandonó la ciudad de León. Con la víctima el patrón fue muy similar, sin embargo, el desenlace terminó siendo mucho más fatídico.
Ella trabajaba en una empresa leonesa, pero desde el confinamiento por la crisis sanitaria había vuelto a su pueblo natal y desde ahí teletrabajaba. «Era una chica muy abierta», recordó un vecino cercano a su familia. «Se llevaba muy bien con la juventud, siempre integraba a todo el mundo. No era la típica estirada».
La relación con el investigado empezó hace «un año y medio o dos», según recuerda otra vecina. «Antes había estado con otro chico». El acusado, a diferencia de su víctima mortal, no era de Mansilla, pero sí que se integró en el pueblo a raíz de su relación con ella.