León es la primera productora de madera de chopo y la tercera de pino de la Comunidad

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A pesar de que la crisis sanitaria ha podido afectar a la campaña maderera, ya que en muchos casos ha sido complicado garantizar las distintas subastas, el sector forestal en Castilla y León sigue estando al alza, por la cantidad de demanda generada por parte de la industria.

De hecho, 2020 se cerró con la licitación por parte de la Junta de Castilla y León de un volumen total de 632.284,03 m3 de madera (615.939,15 m3 de pino y 16.344,88 m3 de chopo) distribuidos en 302 lotes (286 lotes de pino y 16 de chopo) teniendo un volumen medio por lote de aproximadamente 2.000 m3, en una superficie total de 19.841,46 ha.

De los 302 lotes ofertados, quedaron desiertos 116, lo que supone un 33% de volumen desierto en madera de pino y un 8% en madera de chopo

En este escenario, la provincia de León despunta como la principal productora de madera de chopo, con un total de 8.980 metros cúbicos licitados en 2020, de los que se adjudicó el cien por cien, obteniendo así unos ingresos de 663.069 euros tras las subastas. Le sigue muy de lejos Salamanca, con 3.184 metros cúbicos licitados y unos ingresos de 211.101 euros el año pasado.

Por lo que se refiere al pino, la provincia que más volumen sacó al mercado fue Ávila, con 99.394 metros cúbicos adjudicados, seguida de Zamora, con 87.029, y después por León, con 77.886 metros cúbicos subastados por lo que se obtuvo un beneficio de 1.160.301 euros.

Lo que sí se ha demostrado en las distintas subastas celebradas en cada una de las delegaciones territoriales es que se ha registrado un incremento de precio en ambas variedades.

El incremento de precio en la madera de pino fue de un 28% y en la madera de chopo de un 43% en cuanto al precio base de licitación de los lotes adjudicados. El precio unitario medio de adjudicación en madera de pino, en toda la Comunidad es 17,25 euros/m3, siendo Soria la provincia donde más alto alcanzó el precio de dicha madera, con 33,55 euros/m3. Por lo que se refiere al precio unitario medio de adjudicación en madera de chopo, en toda la Comunidad es de casi 70,60 euros/m3, siendo León la provincia donde más alto alcanzó el precio de dicha madera, con 73,84 euros/m3.

Sin embargo, el precio ha caído desde las últimas subastas celebradas en León en 2019 –en 2029 no hubo ninguna– cuando salieron 8.217 metros cúbicos a un precio de licitación de 32,10 euros, que se adjudicaron al cien por cien a 90,75 euros, casi tres veces más que el precio de salida.

De los 302 lotes ofertados en 2020, un total de 183 contaban con certificación forestal y se adjudicaron 115 lotes certificados de madera certificada (106 de pino y 9 de chopo) con un volumen de 284.937 m3 (269.908,19 m3 de madera de pino certificada y 15.028,97 m3 de madera de chopo certificada).

Estas subastas son una de las actuaciones correspondientes al Plan de Movilización de los Recursos Forestales que lleva a cabo la Consejería de Fomento y Medio Ambiente. La utilización de los productos y recursos naturales renovables que se generan en el monte como consecuencia de los procesos medioambientales que en él se desarrollan es una obligación que tiene la Consejería competente en materia de montes, de acuerdo con lo dispuesto en la Ley 43/2003, de 21 de noviembre, de Montes y en la Ley 3/2009, de 6 de abril, de Montes de Castilla y León, y que se realizan a través de los aprovechamientos forestales.

Subastas anuales

Todos los años la Consejería organiza subastas de madera y biomasa en estos tipos de montes (propios, contratados y acogidos al artículo 47), agrupándolas según provincias en dos periodos, uno primaveral y otro otoñal, de acuerdo con un calendario previamente establecido y conocido por el sector. La inmensa mayoría corren a cargo de los servicios territoriales de medio ambiente, aunque en ocasiones, por razón de su volumen, pueden ser llevadas a cabo por los servicios centrales de la Consejería, a cargo del Servicio de Restauración y Gestión Forestal. Sin

De manera paralela al beneficio económico que genera la gestión forestal, merece la pena destacar el beneficio medioambiental, dado que por cada tonelada de madera ‘inmovilizada’ (es decir, transformada en muebles, vigas, chapa, aglomerado, etc.) se fija el 50% aproximadamente de su peso en forma de carbono. Este conocido como ‘secuestro de carbono’ es una de las medidas que los Gobiernos de la Unión Europea incentivan para ralentizar el cambio climático.

Con la excepción de 2018, cuando la adaptación del procedimiento telemático de enajenación a la Ley 9/2017 de Contratos del Sector Público ocasionó un notable retraso en el calendario de las subastas a celebrar en dicha anualidad, en los años anteriores se ha aprovechado en León una media de 150.000 toneladas al año de madera, en dos subastas de primavera y verano, que suponen una fijación anual de 75.000 toneladas de carbono.