El TSJ respalda los recursos de la apicultura trashumante ante las ordenanzas municipales

El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) ha tumbado en los últimos meses las ordenanzas municipales de varios ayuntamientos para respaldar las reclamaciones de las asociaciones de apicultores trashumantes. El Ayuntamiento de Cabrillanes es uno de los municipios de León afectados por estas sentencias que obligan a revocar parte de la ordenanza y a que el Ayuntamiento asuma los costes del proceso. Según señaló ayer su alcaldesa, Lina Freire, el alto tribunal ha obligado al Ayuntamiento a modificar la normativa a instancias de la Asociación Cacereña de Apicultores, que cada año traslada sus colmenares a las zonas más propicias para la floración y el acceso a polen y néctar de sus abejas, especialmente durante la primavera y el verano, y también parte del otoño.

Por su parte, el sector apícola de León asegura que este tipo de colmenas deben cumplir la reglamentación existente con el fin de compatibilizar sus asentamientos temporales con la apicultura estante que permanece durante todo el año.

Según indica Urbano Seco, de la Consultoría Urzapa e impulsor de la asociación de apicultores ecológicos de León, este tipo de colmenas están muy arraigada en toda España, pero no tanto en la provincia leonesa» y es aquí donde algunos sectores apícolas se quejan de la forma en la que algunos apicultores extraprovinciales instalan sus explotaciones en el territorio leones; obviando algunas de las normativas. POr su aprte, el presidente de la Asociación de Leonesa de Apicultores (ALA), Javier Morán, indica que «no estamos en contra de la apicultura trashumante, pero siempre y cuando se lleve a cabo de forma legal respetando todos los protocolos».

En este punto, Seco traslada que existe una legislación diferenciada para la apicultura estática y la trashumante. Además añade que «la solución del problema pasa por que los dos tipos de apicultores se sienten a dialogar y se establezcan unas normativas comunes».

Por su parte, el secretario provincial de Asaja, Antonio Turrado, asevera que «dependemos de los dos modelos de apicultura, pero uno no puede perjudicar a otro, en la provincia de León lo más habitual es la de tipo estante». En concreto, muchos de los apicultores de la forma estática de apicultura consideran que no existe una floración suficiente para que tanta cantidad de abejas las polinicen, por lo que entienden que la llegada de apicultores de lugares como Extremadura perjudica la producción local. La organización agraria, a este respecto, defiende en primera estancia a los productores leoneses. Turrado asegura que «los ayuntamientos intentan obrar de buena fe en beneficio del municipio», pero añade que «en la medida de lo posible se tiene que proteger al productor de la zona».

Actualmente este es un problema que no solo se detecta dentro de la provincia; en la comunidad existe un conflicto de intereses por parte de los dos tipos de producción en el que hay sectores que consideran que la diferenciación de legislaciones hace que un tipo de apicultura tenga ventajas sobre la otra por lo que reclaman una legislación más igualada.