La iglesia parroquial acogió la celebración de una boda de oro

Una eucaristía rememoró la unión en matrimonio de Agustín Martínez Morán y María Concepción Gallego Fernández que se había celebrado cincuenta años atrás, el 15 de noviembre del año de 1952. Estas bodas de oro juntaron en la iglesia parroquial de Villarejo de Órbigo a todos sus hijos habidos en el matrimonio que han sido diez y a sus doce nietos, así como a otros familiares y amigos, lo cual deparo un día muy entrañable y emotivo a la feliz pareja de novios. Después de la misa celebrada en la iglesia de Villarejo pueblo natal del matrimonio, todos los presentes que sumaban alrededor de cien personas se dirigieron a celebrar una comida de hermandad a un conocido restaurante de Hospital de Órbigo. Las bodas de oro son celebraciones muy especiales por la poca cantidad de matrimonios que llegan a superar tantos años de unión marital.