Detienen a cuatro lituanos por su presunta participación en una pelea

Los hechos, que comenzaron minutos antes de las 3.30 horas de ayer en el pub La Parrilla, implicaron a jóvenes de la ciudad y sus alrededores que en ese momento se encontraban tomando una copa, y a los ciudadanos lituanos M. G., de 25 años; D. E., de 22 -ambos domiciliados en León-; R. N., de 24 años; y un cuarto, que tuvo que ser trasladado a un centro hospitalario de León. Los cuatro súbditos extranjeros resultaron finalmente detenidos por su presunta participación en la pelea, que se saldó con, al menos, una quincena de heridos de diversa consideración, que fueron atendidos en el centro de salud de la ciudad, según la policía local. Al parecer, entre otras lesiones y contusiones, uno de los jóvenes afectados, natural de Astorga, hubo de ser tratado de una brecha de unos siete centímetros en la cabeza. Especial virulencia El enfrentamiento, en el que llegaron a verse implicados clientes que nada tenían que ver con el mismo, alcanzó especial virulencia en el interior del local, de modo que algunos vasos y taburetes fueron utilizados como arma arrojadiza, e incluso alguna persona, según testigos presenciales, llegó a ser lanzada por el aire a consecuencia del tumulto que se generó. El suceso motivó la intervención de dos patrullas de la policía local, cuyos agentes tuvieron que poner fin a la pelea y hacer abandonar de forma paulatina el establecimiento a todos los implicados en la misma. Con posterioridad, trasladaron en dos de sus coches a alguno de los detenidos, mientras un vehículo zeta de la policía nacional desplazó al resto, hasta la comisaría. Ya en ella, los ciudadanos lituanos hicieron la comparecencia y quedaron a la espera de pasar a disposición judicial, trámite que se cumplirá, previsiblemente, durante esta mañana, según las fuentes consultadas. El incidente causó gran conmoción en Astorga, máxime cuando últimamente parecen más frecuentes las peleas, en alguna de las cuales se han esgrimido incluso armas de fuego, y los sucesos en las zonas de copas, como el atraco de hace días a un hostelero al que dos jóvenes encañonaron y encerraron durante un cuarto de hora.