Stone Work afirma que sólo necesita socios y que negocia acuerdos con varias eléctricas para que participen
El promotor de la planta de biomasa de La Robla plantea otra en Laciana
Stone Work, uno de los dos socios de Energías Renovables de la Robla (Errsa), la compañía que promueve la planta de generación de energía
Simulación informática de la planta de biomasa de La Robla; la de Laciana sería un calco de ésta
El directivo de Stone Works desveló ayer a este periódico que la nueva iniciativa está muy avanzada por su parte en lo que se refiere al proyecto. El problema que se debe salvar ahora es el de lograr más capital, socios que entren a cofinanciar la planta. En este sentido, mantienen negociaciones avanzadas con Iberdrola, que se muestra «interesada» en la operación, dado que le han aportado estudios similares a los que han propiciado el proyecto de La Robla. Una de las varias condiciones, según Núñez, sobre las que se asienta la negociación es la cuota de participación: «Quiere el 51% del capital», tanto en este como en otros proyectos que baraja Stone Work. Esta compañía ha contactado también con las dos eléctricas con más presencia en León, Endesa y Fenosa, pero Alfonso Núñez señala que hasta el momento «no han mostrado tanto interés como Iberdrola». Esta eléctrica ha decidido además en los últimos meses diversificar su negocio y apostar por las fuentes de energía renovables -biomasa, eólica y solar principalmente- para consolidarse y seguir creciendo. Menos costes que en Sorribos El director del área de Medio Ambiente y Energía de Stone Work -empresa catalana nacida hace seis años y dedicada inicialmente a las demoliciones y desmantelamientos industriales- explica que la planta de biomasa de Laciana sería gemela de Errsa en Sorribos de Alba. Adolfo Núñez defiende que hay «suficientes residuos agroganaderos y forestales» para que sea viable. La compañía catalana tiene estudiado incluso los costes y afirma que serían menores que los de la primera iniciativa -pionera en España-, porque gracias a ella el proyecto de ingeniería ya está hecho y se reducen costes de montaje y generales gracias a la experiencia. Ésta, que comenzará a funcionar en poco más de un mes, está suponiendo una inversión de 9,62 millones de euros, empleará a 14 personas de forma directa y a otras 10 indirectamente; ha recibido subvenciones europeas y del Plan del carbón por 2,7 millones de euros. Consumirá 60.000 toneladas al año de residuos de gallinaza -muy contaminantes- y generará 38 gigavatios/hora al año, gracias una potencia instalada de 5,3 megavatios. Además, las cenizas resultantes se pueden usar como abonos fertilizantes.