El Gobierno conocía que Laciana y Picos no serían reserva de la biosfera

El ministro de Medio Ambiente, en su comparecencia en la Cámara Alta, achacó el anuncio sobre la falsa declaración como reservas de la biosfera de Picos de Europa y el Valle de Laciana, y la ampliación de Muniellos (Asturias» a un «error de comunicación» entre su Gabinete y el comité español en el programa Hombre y Biosfera (MAB). Matas evitó cualquier referencia al documento esgrimido por Villalba, fechado el 24 de julio y recibido por la delegación española el día 30 de ese mismo mes. En ese escrito, firmado por el secretario del MAB, Peter Bridgewater, se acusaba recibo de las propuestas de declaración como nuevas reservas de la biosfera para las Terras do Miño, Dehesas de Sierra Morena, Picos de Europa y Valle de Laciana y la ampliación para Canal y Tiles (La Palma) y Muniellos. Y se solicitaba información complementaria en los casos de Picos, Laciana y Muniellos El parque regional, también Así, el Ministerio debería haber explicado «por qué no se incluyó en la propuesta el Parque Regional de Picos de Europa, dada su estructura muy semejante al Parque Nacional». Igualmente, para Laciana, la Unesco señala que esta «futura» reserva es adyacente a la de Muniellos y preguntaba: «¿Sería posible prever ahora una posible fusión de ambas?». Además requería «un mapa detallado con todas las reservas actuales y futuras de la Gran Reserva Cantábrica». Según aseguró Villalba durante su debate con Matas, esos documentos no llegaron al MAB antes del 23 de septiembre, cuando el comité se reunió para elaborar sus recomendaciones. Por lo tanto, el Ministerio de Medio Ambiente sabía que era imposible la declaración como reserva de la biosfera de esas zonas el 7 de noviembre, cuando, a pesar de todo, anunció la falsa noticia. Cinco días después, el Ministerio aclaraba que la Unesco reclama documentación adicional para ver la posibilidad de declarar toda la Cordillera Cantábrica de una vez y estudiar si se puede adelantar una conjunta para Picos, Muniellos, Somiedo y Laciana, que son limítrofes; se compromete a entregarla en el año 2003. Villalba acusó a Matas, sorprendido por la revelación, de «mantener una actitud frívola, confundiendo a la opinión pública y provocando incredulidad, decepción e indignación social, ciudadana e institucional». «Ha habido negligencia del Ministerio de Medio Ambiente y un intento de manipulación informativa por parte del Gobierno para encubrir su enorme error», aseguró el socialista. El máximo responsable de Medio Ambiente no aclaró la actuación de su ministerio tras recibir la notificación de la Unesco y criticó al senador leonés por llevar a cabo «un vulgar intento de politización de una forma de protección que triunfa y genera grandes éxitos a las zonas que la consiguen». Además, el ministro restó importancia al «fallo» -acusó a Villalba de «sacar de contexto y sobredimensionar un error»- y se felicitó por «la magnífica noticia» de que el resto de las zonas anunciadas si se hubieran convertido realmente en reservas. A pesar de la trascendencia que el asunto tenía para León, ningún otro senador de la provincia, excepto Alfredo Prada, acudió al debate entre Villalba y Matas.