León pugnará por ser casi la mitad de la reserva de carbón de España

El pleno de la comisión regional de minería, que fue presidido por el consejero de Industria de la Junta, José Luis González Vallvé, acordó plantear la asignación a las cuencas de León y Palencia de 5.032.681 toneladas anuales -que significan 5.339 trabajadores- en base a los argumentos reconocidos a todos los niveles de productividad y calidad del mineral que en ellas se produce. Vallvé, al término del pleno celebrado en la sede de su Consejería en Valladolid, anunció que el texto de la propuesta será enviado al secretario de Estado de la Energía, José Folgado, en los próximos días. En el documento, todos los agentes implicados con el sector propugnan como aval de esta reclamación «el enorme esfuerzo, de trabajadores y empresarios, que se ha hecho en el sector en la comunidad autónoma, el bajo contenido de azufre del mineral y los ratios de productividad obtenidos, más altos que en otras regiones», en palabras del consejero. «Eso hay que venderlo en Madrid, en Bruselas y donde haga falta. En un mundo competitivo no vamos a vivir sólo a base de ayudas y estamos todos convencidos de que hay que vender el carbón de Castilla y León», subrayó, con la satisfacción de «haber conseguido ponernos de acuerdo» en algo tan importante y casi sin precedentes en un sector tan complicado. También reiteró que «esta región tiene argumentos para defender el sector; lo va a hacer y lo está haciendo. Los demás, cada uno que saque las conclusiones que le parezca», dijo en referencia que tanto a otras comunidades como al Gobierno central pueda no parecerles bien. «Tenemos que convencer a todo el mundo de esta propuesta», que no va contra nadie, sino en favor de León y Palencia, matizó. Vallvé manifestó que la consecución de este cupo estratégico, «en el caso de ser aceptado», significaría «poner punto y aparte a la filosofía vigente hasta hora en cuanto a reducción de la producción, ya que ha llegado el momento de sustituir este término por el de estabilidad», dado que las minas leonesas y palentinas han sabido y demostrado con cifras el responder a las reconversiones más recientes. El consejero también insistió en «que nadie se llame a engaños, a nosotros no nos corresponde decidir sobre esta cuestión, si defender la posición que hemos adoptado de continuidad y de estabilidad». Estabilidad y reactivación Vallvé considera además que otra justificación para mantener la producción actual, además de los resultados es dar sentido y continuidad a la política de ayudas que las administraciones central y autonómica, con el Plan del carbón y la Ley de Actuación Minera, están desarrollando, y que necesitan tiempo para lograr sus objetivos. Con tan sólo un 6% de la población de la comunidad autónoma, aglutinan el 10% de los incentivos de la Agencia de Desarrollo -casi el doble de lo que les correspondería en cuanto a número de habitantes- y casi cinco veces más por habitante de inversiones procedentes del Estado, en palabras del consejero. «Hay un primer cambio con el Plan del carbón, con una decisión política de hacer inversiones fuertes en estas zonas; y ahora también hay un segundo cambio, que a mi me parece incluso más importante en cuanto al fondo, que es intentar definir, después de aprobar el Reglamento comunitario, un escenario de estabilidad en la explotación del carbón», añadió.