«Para una fuente energética que tenemos, como es el carbón, debemos de cuidarla»

-Las cuencas han dado un paso adelante, sin fisuras ni precedente, para exigir el mantenimiento de su peso actual. -Es muy importante y hay que agradecer lo que supone de cesión por cada uno de ellos. Cómo no vamos a estar de acuerdo al menos en que León y Palencia son capaces de producir al menos esos 5.032.681 toneladas anuales de aquí al año 2010. Da cuenta de la evolución del sector, y ha llevado a todo el mundo a la convicción de que se puede avanzar positivamente: se ha aumentado la productividad, ha disminuido la accidentalidad, los niveles de azufre de nuestro carbón son los más bajos de todos...; incluso hemos conseguido unirnos, algo que en otras regiones es más complicado. Es para felicitarnos, pero esto no es más que la definición de una postura regional de común acuerdo; a quien le corresponde decidir es a Bruselas a propuesta del Gobierno español. Esta propuesta hay que enviarla, tratar de convencer a Madrid y venderla en general a todo el mundo. -¿Hasta qué punto están dispuestos a llegar para lograrlo? -Más que un tema de presión es de convencimientos. Nosotros estamos convencidos, y lo que tenemos que hacer es convencer a los demás. Hay reflexiones de política energética europea que se escapan del ámbito de esta Consejería e incluso de España. Para una fuente energética que tenemos, como es el carbón, debemos de cuidarla. Sobretodo en un escenario internacional donde el petróleo está cerca de los 30 dólares el barril, cuando veíamos que en la previsión del plan energético se hablaba de 22. Hay dos formas de ver el asunto: con criterios puramente economicistas y con criterios sociales. Incluso con los economicistas el carbón debe de sobrevivir: no es justo aplicarle un precio cuando no sabemos lo que puede pasar mañana con los suministros de petróleo o de gas de países en los que todos sabemos lo que puede pasar. Y cuando acabamos de ver un petrolero que se ha hundido ahí en frente, ¿donde están incorporados los costes de esto que está pasando hoy? Todo el mundo está defendiendo que se incorporen los costes a cada combustible de lo que realmente le supone a la sociedad. Me pregunto qué ocurriría si le aplicamos al petróleo todos los de lo que está pasando ahora. -Al carbón se le acusa de ser uno de los mayores contaminantes. Pero desarrolla proyectos para reducir azufre en los propios lavaderos; y las térmicas se renovarán desde el 2004. -Es un argumento que escapa un poco al Reglamento de ayudas al que nos tenemos que ajustar para fijar la reserva estratégica. Lo es más de política energética. El carbón no es elemento más contaminante: no habría que hablar más que del motor de explosión. Las eléctricas están todas embarcadas en un proceso de adecuación medioambiental de los equipos y tenemos que agudizar el ingenio, aplicar tecnología de investigación, desarrollo e innovación (I+D+I) al carbón para intentar que incluso esa contaminación que produce se reduzca más. Creo en todos los esfuerzos que hagamos para reducir las emisiones y tenemos que respaldarlo. -La modernización es otro pilar para acceder a ayudas. -Tenemos un factor natural en León y Palencia muy bueno: que el contenido de azufre de nuestro carbón es el más bajo. -¿No habría que aprovechar estos esfuerzos para que Bruselas apoye la reactivación? -A las cuencas ya las ayuda Europa. El nivel de incentivos que se puede conceder a la inversión es del 40%. En este momento vive en ellas el 6% de la población de Castilla y León y la Agencia de Desarrollo invierte ahí el 10%: tienen el doble de incentivos que otras zonas. Además, hay en sectores concretos ligados al ámbito energético como el eólico que ha creado en León más de 600 empleos en muy pocos años. Y se están esperando parques que producen riqueza para los ayuntamientos. Ahí hay ayudas también de I+D+I. No debemos olvidar que estamos en un escenario de liberalización del mercado eléctrico y que el input del precio energético es muy importante para los productores industriales. Tenemos que tener cuidado de no encarecer ese input para no perder competitividad. El hecho de seguir apostando en una misma zona por el sector energético y por otro sector minero como es la pizarra, que ha creado más de 2.000 empleos y es el más expansivo en la comunidad, creo que es una buena muestra de la reactivación. Lo que es imposible es que se produzca en el mismo sitio en que desaparece el carbón. Lo que pasa es que se da a 40 o 50 kilómetros. -El futuro puede ser, según usted, halagüeño... -Contemplo con optimismo la evolución de tres sectores: la energía renovable, y ahí está la fabricación de elementos que se está produciendo en el Bierzo; el de la pizarra, con La Cabrera; y el del turismo, donde una de las actuaciones del Plan del carbón es ver definitivamente qué vamos a hacer para incentivar el turismo en las zonas mineras. Son tres sectores que están dando una respuesta a esa reactivación. -El color político en Valladolid y en Madrid es el mismo, el del PP. ¿Que pasaría si le pidieran mantenerse al margen de la exigencia de reserva estratégica de carbón que plantea la comunidad? -Prefiero no plantearme esa cuestión y pensar que vamos a ser capaces de convencerles. Bien entendido que la responsabilidad es de ellos. Tendríamos es que darle a nuestra posición mucha fortaleza. Técnica, que creo que el informe que hemos hecho se le da, y también territorial. Y el hecho de que nos hayamos puesto todos de acuerdo nos da bastante fortaleza. Espero poder convencerles, pero lo que está claro es que la responsabilidad la tienen en Madrid. -Es de suponer que no se podría a los pies de los caballos si no hubiera posibilidades... -Entiendo, sinceramente, que está suficientemente justificado. Lo que ocurre es que lo que no tengo en este momento en mente son los equilibrios nacionales que un secretario de Estado de Energía debe de tener. Y que yo tengo de respetar que los tenga; igual que él debe de respetar que yo defienda los intereses de esta región.