El vacuno de carne defiende el tamaño «relativamente pequeño» de sus granjas
La nueva ordenación apoya a las explotaciones familiares con nuevos requisitos ambientales
El 75% de las granjas son familiares. ANA F. BARREDO
Los ganaderos españoles dedicados al vacuno de carne rechazan entrar en el debate generado en torno a las «macrogranjas» y aseguran que es un sector cuyas explotaciones tienen un tamaño medio «relativamente pequeño».
Así lo señala en una entrevista con Efeagro la gerente de la Asociación Española de Productores del Vacuno de Carne (Asoprovac), Matilde Moro, quien indica que esa media es de 26 vacas nodrizas y de 100 terneros en los cebaderos.
Por eso, no es un tema que les preocupe «especialmente» aunque incida en la necesidad de afrontarlo «como en muchos otros sectores» pero sin «demonizar» porque, «a veces, puede haber una intencionalidad» que «no compartimos».
Bajo su punto de vista el tamaño «ideal» de una granja es «el que permita a una familia vivir de una manera digna» de su actividad.
En ese sentido, indica que «más del 75 %» de las granjas de vacuno de carne que hay en España son «familiares».
Norma de ordenación
Además, valora el trabajo que está desarrollando el Gobierno para sacar adelante un real decreto que ordenará esta rama de la ganadería.
El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha desarrollado un trabajo «bastante bueno», intentando contar «en todo momento» con el sector implicado.
Lo que «más le preocupa» del texto son los requisitos medioambientales por lo que pide que, antes de hacer cualquier nueva inversión, se garantice que servirán para una reducción efectiva de las emisiones.
No obstante, en materia de sostenibilidad medioambiental llevan «tiempo» trabajando «intensamente» y, de hecho, acaban de finalizar el proyecto Life Beef Carbon para reducir al menos un 15 % las emisiones de gases de efecto invernadero en los próximos diez años.
En octubre comenzaron otro proyecto (una continuación del Life Beef Carbon) para involucrar también al vacuno de leche.
En materia de bienestar animal es un sector que «se ha ido adelantando a muchas de las medidas» que recogerá el decreto de ordenación, mientras que en el ámbito sanitario el «mayor reto» ahora es el de avanzar aún más en el «uso prudente de antimicrobianos» ya que el trabajo desarrollado es «bastante favorable» en este asunto.
Este sector no escapa a la escalada de precios en todos los insumos, especialmente los piensos para la alimentación animal, que se arrastra desde hace meses.
De hecho, el precio del pienso para cebo de terneros en 2021 fue, de media, un «25 % más alto» que el registrado en 2020.
Una situación que ha llevado a una «bajada de rentabilidad» y, con ello, la «retracción de entradas» de terneros en los cebaderos.
Eso provoca un descenso de la producción de carne de vacuno y, con ello, un mayor precio de este alimento que ha subido, afortunadamente, «desde mediados de 2020 en España y en el resto de Europa».