Los ataques del lobo al ganado aumentaron un 20% en León con 347 animales muertos

La tendencia de los últimos años, que apuntaba un progresivo descenso de los ataques del lobo al ganado, tanto en la provincia de León como en el conjunto de la comunidad, se ha roto.

Según los facilitados por la Consejería de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Vivienda, el lobo protagonizó 210 ataques a ganadería en la provincia durante 2021, de los 2.714 que perpetrados en toda la comunidad autónoma, lo que significa un aumento de casi 20% respecto al año anterior, cuando se contabilizaron 174 incidentes en León, de los 2.629 registrados tanto al sur como al norte del Duero en Castilla y León.

Además, los encuentros han sido más violentos ya que el incremento de cabezas de ganado muertas ha sido de casi el 30 por ciento, según las mismas fuentes.

De los 248 animales muertos en 2020 en la provincia, de los que 129 eran cabezas de ganado mayor y 117 de ganado menor, el pasado 2021 se registraron 347 bajas, 193 de ganado mayor y 154 de menor.

En el conjunto de la comunidad el lobo acabó con la vida de 3.859 animales en 2020, cifra que se eleva a las 4.296 durante 2021.

En este último año, la provincia que más ataques ha recibido es Ávila, con 1.345 ataques y 1.490 cabezas muertas, seguida de Segovia, con 555 ataques y 891 bajas, y Zamora, con 296 siniestros y 890 cabezas finadas. La siguiente en la lista es León, con los 210 ataques mencionados y las 347 bajas.

La provincia que menos ataques registró fue Valladolid, con dos, y dos animales muertos.

Estos datos confirman que la evolución de los ataques al ganado ha sufrido un cambio de tendencia, en 2018 la provincia registró 238 ataques, por los 192 de 2019 y los 174 de 2020. Desde 2018 han sido 907 cabezas de ganado, pasando de las 358 (200 de ganado mayor, 158 de ganado menor) de ese aó a las 303 de 2019 (155 de ganado mayor y 148 de ganado menor) y las 246 de 2020 (129 de ganado mayor y 117 de ganador menor).

Esta tendencia descendente se rompe en 2021 con 21o ataques y 347 muertes.

A pesar de que aún no hay datos contabilizados de los ataques de 2022 , el primer año en el que tanto la caza como los controles poblacionales quedaron prohibidos tras la entrada en vigor del la orden que incluye al lobo en el Lespre (Listado de Especies Silvestres de Protección Especial) y que entró en vigor en septiembre de 2021, se tiene la certeza de que los ataques del lobo hayan aumentado considerablemente al norte del Duero, donde hasta esa fecha la especie era cinegética. Así lo considera el consejero de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Vivienda, Juan Carlos Suárez-Quiñones, que en su última entrevista a Diario de León, confirma que desde que no se hacen controles poblacionales al norte del Duero, las poblaciones han crecido considerablemente, por lo que se prevé que los ataques y los daños también se incremente, puesto que «no hay en estos momentos ningún mecanismo para evitarlo» .

Según los datos incluidos en la proposición no de ley propuesta la semana pasada por el PP en las Cortes de Castilla y León, y que tenía como objetivo instar al ministerio para que permita de nueva el control de la especie, las poblaciones han crecido en este último año hasta un 43%. De todos modos, se reclama la elaboración de un censo oficial a nivel nacional para conocer el estado real de las poblaciones. La temporada pasada, la 2020-2121, fue la última en la que se cazaron lobos en la comunidad, antes de la prohibición del ministerio en septiembre de 2021. En esta temporada se abatieron en la provincia 25 lobos, o bien por la caza o por controles poblacionales, de los 59 abatidos en toda Castilla y León.