Ribera aboga porque los daños del lobo tengan respuesta inmediata en los PGE
La vicepresidenta insiste en buscar el equilibrio entre la ganadería y la especie protegida
La ministra para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, subrayó ayer que hay que facilitar la «convivencia responsable» entre la protección del lobo y la actividad ganadera pero asumiendo que los daños que pueda producir en las cabezas de ganado tengan una respuesta inmediata en los Presupuestos Generales del Estado (PGE)».
En una entrevista en TPA Noticias Matinal antes de participar en Oviedo en una jornada sobre transición energética, la vicepresidenta tercera del Gobierno ha recalcado que hay que «dar cobertura a las personas que conviven con los lobos», pero teniendo en cuenta que está prohibida su caza tras su inclusión en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (Lespre).
«Eso no significa que en un determinado momento no tengamos que intervenir porque resulte imprescindible», ha precisado la ministra, que ha indicado que hay que invertir en prevención e intentar «desatascar esta situación desafortunada que traslada un tensión muy importante sobre el territorio» y conseguir el «equilibrio» entre la existencia de una especie protegida como el lobo con la actividad ganadera tradicional.
Tras admitir que hay que actualizar el censo del lobo, la ministra ha abogado por «escuchar de forma muy cercana a los ganaderos y trabajar con las autoridades locales», algo que ha considerado «capital a la hora de identificar cómo conseguir ese equilibrio».
Por su parte, la organización agraria Coag sostiene que los ataques del lobo a la ganadería se han incrementado desde que está en vigor el nuevo estatus del animal, al ser incluido en el listado de especies que requieren especial protección, y ha denunciado que desde entonces se han retrasado los expedientes de indemnización a los ganaderos que sufren ataques.
Coag critica además que la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, no ha aportado aún los 20 millones de euros que prometió tras incluir el lobo en el listado Lespre.
Del mismo modo, la organización agraria ha lamentado que el consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, no haya redactado aún una normativa que proteja al ganadero al norte del río Duero, donde el lobo ha dejado de ser especie cinegética desde el pasado otoño tras ser incluida la especie en el listado Lespre.
La organización reclama a la Consejería de Medio Ambiente que acorte los plazos de las ayudas por los ataques del lobo que sufren los ganaderos situados al sur del Duero y ha lamentado que al norte de ese río ni se conceden compensaciones económicas por los ataques ni se las espera.