Boca de Huérgano reclama a la Junta mejoras en los montes tras el incendio

La delegada de la Junta de Castilla y León, Ester Muñoz, mantendrá una reunión con el alcalde de Boca de Huergano, Tomás de la Sierra, y los presidentes de las juntas vecinales del municipio, Valverde de la Sierra, Espejos de la Reina y Barniedo, afectados por el incendio que arrasó 1.200 hectáreas en el parque regional montaña de Riaño y Mampodre. En esta reunión los representantes políticos y locales van a proponer que tanto las veredas como los caminos, así como la vegetación tienen que estar limpio «para evitar males mayores en tema de incendio como este que hemos tenido», señala de De la Sierra, que insiste en que los caminos tienen que estar en pleno uso y disfrute. «Para eso una solución es que los ganaderos puedan tener sus animales en los montes. En épocas pasadas el ganado pastaba por la montaña y a la vez que limpiaban los montes. Las cabras son uno de los animales que más limpian el monte», explica. El alcalde incide que al estar los pueblos vacíos los montes están abandonados.

Del mismo modo, los afectados quieren recuperar parte del patrimonio perdido solicitado nuevos árboles autóctono y la reconstrucción del paraje de los abedules en Valverde de la Sierra. Pedirán subvenciones para los ganaderos que han perdido sus zonas de pastos. Algunos de esos pastos estaban alquilados a ganaderos de otras provincias.

Otra de las peticiones es que las personas que trabajen en los montes sean de la comarca ya que «aquí hay mucho paro».

De la Sierra ya había manifestado el primer día en que el fuego empezó a descontrolarse que estos incendios suceden por falta de previsión ya que «hay que limpiar las veredas, los caminos y la sendas. Están llenas de hojarasca, de maleza y palos secos es lo que primero arde». Considera urgente que se cree una mesa redonda que dé soluciones y donde estén representados todos los alcaldes. «Es necesario limpiar el monte desde los meses de septiembre a noviembre para prevenir. Hay que recordar que nuestros antepasados apagaban el fuego con ramas», añade. Además recordó que con una buena prevención se evitan estos gastos elevadísimos que significan el apagado del fuego en el monte además de las grandes pérdidas ecológicas y medioambientales.

Tras casi una semana el incendio de Boca de Huergano llegó a declararse de nivel dos ante la proximidad de las llamas a la localidad de Barniedo donde el fuego se detuvo en apenas 200 metros tras el cambio d ela dirección del viento. También fue necesario la intervención de Unidad Militar de Emergencia (UME). La zona afectada llegó tener más de 37 kilómetros de longitud.