Los regantes preparan una gran protesta por la «aberración» de enviar el agua a Portugal
Los afectados exigirán la dimisión de la vicepresidenta Teresa Ribera si no cierra «de inmediato» las compuertas
«Estamos ante una dictadura de Gobierno que hace las cosas sin contar con nadie». Este es el diagnóstico que los regantes del Sistema Esla, que alcanzan una superficie de 100.000 hectáreas, realizan sobre la decisión del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico de llevar agua de los embalses de Riaño y Porma a Portugal para que sea utilizada en la generación de electricidad. Es una «aberración» que tendrá una respuesta contundente e inmediata con la organización, en primer lugar, de una gran manifestación en la que participarán todas las comunidades de regantes afectadas por la decisión del departamento dirigido por la vicepresidenta Teresa Ribera. La decisión fue adoptada en el transcurso de una reunión celebrada ayer en Cabreros del Río, en la que se desató la indignación por una medida que, consideran, va a arruinar al campo leonés.
El presidente de la Comunidad de Regantes de los Payuelos, Jorge Álvarez Gago, asegura en nombre de todos los afectados que van a pedir una reunión urgente con la vicepresidenta Ribera para explicarle el perjuicio que su decisión supondrá para los agricultores y para la producción alimentaria. «Si no se cierran las compuertas de inmediato, exigiremos la dimisión de la ministra», asevera Álvarez Gago, quien recuerda que en esta campaña se han restringido los cupos de agua para poder ahorrar para la siguiente campaña, «no para que se lleven el agua para que las eléctricas hagan negocio en Portugal».
El saqueo a Riaño
La postura de no permitir el paso del agua es unánime entre todas las comunidades de regantes, que ahora estudian si convocar la protesta en las puertas de la Subdelegación del Gobierno en León, frente a la Confederación Hidrográfica del Duero o incluso en el pantano de Riaño. Entre sus argumentos, destacan que Riaño es un embalse bianual, y que el año pasado quedó con unas reservas del 45 por ciento, después de un año hidrológico bueno. «Si este año se queda al 20 por ciento por ceder el agua a Portugal tenemos un problema muy grande porque no vamos a poder cultivar ni regar», sostiene Gago.
De momento, se reunirán el lunes con el subdelegado del Gobierno, Faustino Álvarez, a quien trasladarán su malestar. «El ministerio no puede sacar una norma de hoy para mañana sin tener en cuenta unas consecuencias que son irreversibles», añade el presidente de los regantes de Payuelos, que pregunta a Ribera si prefiere «que se genere electricidad en Portugal y que los lineales queden vacíos porque no se puede regar ni producir alimentos».
Gago defiende que los regantes siempre han realizado una buena gestión del agua, y que la opción de futuro que tiene el campo y la sociedad es modernizar el campo, porque es la forma de que los jóvenes «tengan ilusión y se incorporen al sector, porque ven que con el regadío se general riqueza». De hecho, recuerda, León es la provincia que más jóvenes atrae al campo, de momento.