«El consumidor debe tener energía constante, sostenible y asequible»
El cambio de modelo energético es una oportunidad para Castilla y León, «con redes eléctricas privilegiadas», que nos puede permitir «liderar la transición energética». Marcos Valles asegura que el camino es seguir apostando por la generación eléctrica y atraer industria «que nos permita generar empleo de calidad».
A su juicio, los vectores nuevos como el hidrógeno generarán muchas oportunidades y es «vital» el papel de la administración que es quien debe liderar los proyectos colectivos, como la red de calor de León.
A corto plazo lo más importante es no perder los proyectos que están en curso, «con un esfuerzo combinado» de las administraciones, flexibilizando la tramitación y dedicando más personal, señala Valles, que considera que a largo plazo es necesario realizar una labor pedagógica, formar profesionales y facilitar las inversiones locales. Asegura que el almacenamiento energético «es el presente», especialmente en autoconsumo, y que es el aliado natural de la generación renovable porque resuelve la «intermitencia» de este tipo de energías. Según explica, el reto es que bajen los precios de las instalaciones para que sean retables para el consumidor y que las otras tecnologías de almacenamiento avancen más.
Señala que las comunidades energéticas deberían estar lideradas por la administración pública para «alinear todos los objetivos» y que la electricidad debe ser constante y sostenible, a un precio asequible.