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MEDIO AMBIENTE

León acelera la era renovable con vía libre a cuatro parques con 390.000 placas solares

Los nuevos proyectos con DIA favorable se implantarán en Villadangos, Cuadros, El Burgo Ranero y la zona de Cea

Placas solares en la localidad de Villimer. JESÚS F. SALVADORES

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León

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La agilización de la implantación de las energías renovables ya está tomando pulso en León, donde ayer mismo se publicaba el visto bueno ambiental cuatro grandes proyectos fotovoltaicos para sembrar sendas zonas de la provincia con más de 390.000 paneles solares.

Las cuatro iniciativas ya tienen aprobada la Declaración de Impacto Ambiental a través de las pertinentes órdenes de la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio publicadas en la edición de ayer del Bocyl.

Se trata de la planta solar fotovoltaica La Serna y sus infraestructuras de evacuación, que se ubicará en los términos municipales de Cuadros y Sariegos, promovida por Naturgy Renovables; la planta fotovoltaica La Fenera y su infraestructura de evacuación asociada, en el término municipal de Villadangos del Páramo; la planta solar fotovoltaica Las Majadas Solar y su infraestructura de evacuación, en los términos municipales de Santa María del Monte de Cea y Valdepolo, promovida por Onatrium Solar, S.L. y la planta solar fotovoltaica Otero y su infraestructura de evacuación, que se instalará en el término municipal de El Burgo Ranero, promovida por Promalfar Logistia.

Ocupación de suelo

Las cuatro instalaciones aprobadas ocuparán más de 325 hectáreas de seis municipios

Ninguno de los proyectos sobrepasa los 49,9 megavatios de potencia, por lo que solamente requieren la autorización ambiental de la Junta de Castilla y León y no la del Estado, que se reserva para los parques renovables de mayor potencia. Entre todas ellas, se podrán en la red más de 170 MW de potencia, con una ocupación de suelo que supera las 325 hectáreas.

Incompatible con el monte

En la planta que se instalará en Villadangos, los promotores se han visto obligados a cambiar la ubicación de parte de sus módulos ya que ocupaban 15 hectáreas de suelo de uso forestal, del monte comunal de Villadangos del Pármao y que es incompatible con la instalación de la planta. y la vinculación ecológica de este hábitat con especies de fauna de interés incluidas en el Listado de Especies con Protección Especial (Lespre), justifica la permanencia de esta superficie con uso forestal, sin que tenga cabida considerar el carácter de excepcionalidad.

En el caso de los parques ubicados en Santa María del Monte Cea, Valdepolo y El Burgo Ranero las afecciones destacadas se refieren especialmente a zonas concentración parcelaria, obras de infraestructura rural y a suelo rústico con protección agropecuaria, por lo que se requiere que se tengan en consideración una serie de condiciones relativas al drejane y a los accesos a las fincas.

Potencia limitada

Ninguno de los parques supera los 49,9 MW de potencia, el límite para ser aprobado por la Junta

En estos casos, no existe coincidencia geográfica de los proyectos con la Red Natura 2000, ni se prevé la existencia de afecciones indirectas» que pudieran causar perjuicio a la integridad de cualquier lugar incluido en aquella, siempre y cuando se cumplan las condiciones expuestas en el referido informe».

En el caso del parque que se instalará en Cuadros y Sariegos, el estudio señala que la única afección que se produce es el vuelo de la línea de evacuación sobre el llamado ‘Camino del Salvador’, uno de los muchos itinerarios que tiene el Camino de Santiago en España, que, en este caso, no está declarado BIC, y se considera compatible la realización del proyecto.

Incompatibilidad

El proyecto previsto para Villadangos se modificó porque afectaba a un monte de uso comunal

En cualquier caso, la viabilidad ambiental del proyecto y, en particular, su línea eléctrica, se condiciona a la evacuación por la margen izquierda del río Bernesga compartiendo con líneas ya existentes o, en su caso, el soterramiento de la línea.

Por lo demás, la Declaración de Impacto Ambiental recoge que no se producirá un efecto sinérgico significativo, ni a nivel socioeconómico, ni en lo referente a la alteración paisajística ni por la pérdida de hábitat asociada a la ocupación del territorio.