Iconos de la minería
El centro celebra un seminario que se centró en su primera sesión en los castilletes más emblemáticos de las cuencas de Sabero, El Bierzo y Laciana
Uno de los castilletes que aún se conservan en la provincia. DL
El Museo de la Siderurgia y la Minería de Castilla y León, organizó este fin de semana dentro de su programa formativo un seminario titulado Castilletes mineros .
Los castilletes son el símbolo más reconocido de la minería, auténticos «faros de interior» que señalizan el lugar donde existe un pozo minero. La evolución de la actividad minera, primero, y el fin de la misma, después, ha hecho desaparecer casi por completo estas elegantes estructuras del paisaje de las cuencas.
Por este motivo, para dar a conocer los castilletes que aún existen, los que en su día desaparecieron y concienciar del valor histórico y patrimonial de los mismos, el museo organiza este seminario, cuya primera sesión estuvo dedicada a conocer la historia y características de los castilletes de las cuencas mineras de Sabero, El Bierzo y Laciana.
Los encargados de impartir esta sesión fueron, en la parte dedicada al Bierzo y Laciana, el doctor ingeniero de Minas por la Universidad Autónoma de Madrid Roberto Matías y, en la parte dedicada a Sabero, Carlos García ‘Kubala’, exminero, investigador y gran conocedor de la historia de la cuenca minera de Sabero.
La segunda sesión, estará dedicada a los castilletes de las cuencas de Ciñera, Matallana y Palencia, se impartirá sábado 1 de abril y en ella participarán los investigadores Fernando Cuevas y José Manuel Sanchís.
Más que un símbolo
El castillete de una explotación minera es la estructura situada sobre pozo, y su principal función es la de soportar las poleas a la suficiente altura sobre el brocal (boca) del pozo para permitir las maniobras de extracción.
Por las poleas, situadas en la parte superior del castillete, pasan los cables que sostienen en el interior del pozo las jaulas que circulan por él. Estos cables son accionados por la máquina de extracción, que en la gran mayoría de los casos se encuentra en la superficie. Si la máquina de extracción se sitúa sobre el castillete, este se viene a denominar torre de extracción.
El castillete propiamente dicho se compone en la mayoría de los casos de cuatro pies verticales que sostienen las poleas en su parte superior y dos tornapuntas, enlazados entre sí, que dan estabilidad y resistencia.
Los materiales utilizados para la construcción de los castilletes son principalmente acero y hormigón, aunque en el pasado se hicieron también con madera y mampostería.