Un logro al alcance de la mano pese al «susto» de la montaña de Riaño
La aparición de cinco animales bovinos que resultaron positivos en la prueba de intradermotuberculinización de la campaña de saneamiento ganadero en la montaña de Riaño del pasado verano puso en jaque los avances logrados en tuberculosis bovina en la provincia y generó una fuerte polémica sobre los controles normativos. Los casos detectados pertenecían a cuatro explotaciones diferentes, una ubicada en la localidad de Lario y las otras tres en Riaño, consideradas estas últimas como una única explotación a efectos epidemiológicos y sanitarios, ya que comparten medios de producción.
La explotación de Lario contaba con un censo de 141 animales y fue la primera en la que se diagnosticó un animal positivo en el que aparecieron lesiones en matadero, por lo que fue objeto de decomiso total, tomándose muestras para realizar un cultivo que resultó ser positivo.
Ante esta situación y, dado que la provincia de León está en proceso de calificación para ser declarada en enero del próximo año oficialmente libre de tuberculosis bovina, la Dirección General de Producción Agropecuaria se adoptó la medida de realizar un vaciado sanitario de esta explotación, tal como se recomienda en la normativa europea y nacional al respecto.
Posteriormente aparecieron cuatro animales positivos en tres explotaciones de Riaño con un censo de 547 animales, los animales positivos fueron sacrificados y se tomaron muestras para la realización de la prueba PCR directa, con resultados positivos en todas ellas.
A la vista de esta nueva situación, se efectuó un planteamiento global, sin menoscabo de las medidas sanitarias y de bioseguridad necesarias que eviten la dispersión de la enfermedad tanto al ganado doméstico como a los animales silvestres, por lo que se consideró adecuado dejar sin efecto la resolución de vaciado sanitario, elaborándose un plan de actuación a llevar a cabo por la Unidad Veterinaria de Riaño en estas explotaciones afectadadas, con actuaciones previstas de carácter sanitario, por un lado, y de bioseguridad, por otro.