La rehabilitación del Pozo María dará comienzo este próximo verano
La licitación será en el próximo mes de mayo con un importe de 1,2 millones de euros
La antigua explotación minera se encuentra en Caboalles de Abajo. MARCIANO PÉREZ
El proyecto de rehabilitación de la antigua explotación minera María, ubicada en la pedanía lacianiega de Caboalles de Abajo, como Archivo Histórico de las Familias Mineras será concluido «en breve» y las autorizaciones administrativas serán tramitadas a lo largo del mes de abril, según afirmaron fuentes de la Junta de Castilla y León, administración que adquirió esta instalación minera, ubicada en la pedanía lacianiega de Caboalles de Abajo, en el año 2020 con el objetivo de llevar a cabo el citado proyecto.
En este sentido, estas fuentes señalaron que el objetivo es licitar las obras a lo largo del mes de mayo, por importe de 1,2 millones de euros y comenzar los trabajos de replanteo y demoliciones previas durante este próximo verano.
A partir de esta previsión, la Fundación Patrimonio Natural de Castilla y León ya ha autorizado al ayuntamiento de Villablino para que organice la Feria del Libro en los «espacios exteriores» del Pozo María, el próximo día 6 de mayo «será la última actividad pública que autorizará la Fundación antes del inicio de las obras de rehabilitación» matizaron dichas fuentes.
La adquisición del simbólico Pozo María se hizo efectiva por la Consejería de Fomento y Medio Ambiente por un importe de 70.000 euros que, junto con un proyecto de adecuación y de recursos de interpretación de más de 100.000 euros, pone a disposición del municipio de Villablino estas instalaciones con el fin de contribuir a la dinamización turística y económica y la generación de empleo en el valle de Laciana, a través de este patrimonio cultural y minero.
Dentro de las previsiones, la rehabilitación de este emblemático pozo se estructura en dos fases, que arrancarán con la intervención en el castillete, el cobertizo, donde se colocará el hito memorial, y en los edificios del recinto para transformarlos en un espacio museístico, expositivo y cultural. La segunda fase se centrará en el entorno exterior, a fin de armonizar el entorno creando un jardín público. Del castillete se recuperará la escalera de subida a la cabina superior, que se convertirá en un mirador. En el área del cobertizo se trabajará en una cubierta de chapa galvanizada, una «alfombra» de madera y una cubierta de policarbonatotraslúcido. La intervención permitirá reconstruir una jaula-ascensor, reparar las campanas de señales y el marcador de jaulas, como elementos claves de la explotación minera, además de la recuperación de los raíles y las vagonetas junto con una pasarela-mirador sobre las tolvas del cargadero. También se colocarán bancos y pedestales de hormigón blanco prefabricados, para charlas y explicaciones a grupos de visitantes.
También intervendrán en los edificios para albergar un centro documental de dos plantas.