El Gobierno prohíbe el movimiento de ganado bovino desde Castilla y León
El ministerio responde y deja sin efecto una resolución de la Junta más flexible en relación con la tuberculosis bovina
El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (Mapa) prohibe el movimiento de ganado bovino desde Castilla y León. Sólo se permitirán los movimientos de bovinos fuera de Castilla y León si su destino directo es el sacrificio en matadero.
El Gobierno ha publicado una orden que deja sin efecto una resolución de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de Castilla y Léon sobre erradicación de tuberculosis bovina «para evitar poner en riesgo el estatus sanitario de la cabaña ganadera».
El Mapa informó ayer en un comunicado, tras la publicación de la orden en el BOE, de que adopta esta decisión «dada la gravedad de las consecuencias que se pudieran derivar de la aplicación de la resolución de la Junta de Castilla y León».
El Gobierno central reconoce que esta orden ministerial es una «medida sin precedentes, que se mantendrá vigente durante el tiempo necesario hasta que la Junta de Castilla y León derogue la resolución y restablezca el cumplimiento de la normativa comunitaria y nacional».
En concreto, el Ejecutivo limita desde ayer el movimiento del ganado bovino en Castilla y León como respuesta a una resolución autonómica que «vulnera gravemente la normativa comunitaria y estatal respecto a la erradicación obligatoria de la tuberculosis bovina, ya que permite el movimiento de animales, expresamente prohibido, desde explotaciones con la calificación sanitaria suspendida o retirada».
Sólo se permitirán los movimientos de bovinos fuera de Castilla y León si su destino directo es el sacrificio en matadero o, si el destino es distinto de un matadero, sólo se permitirá el movimiento a cebaderos bajo «estrictos» requisitos de sanidad tanto de los animales como de las explotaciones de origen.
Así, la orden ministerial establece medidas «urgentes e inmediatas» para «impedir el riesgo de dispersión» de esta enfermedad fuera del territorio de Castilla y León, tras la publicación en el Boletín Oficial de esa comunidad autónoma, el pasado 15 de mayo, de una resolución de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural.
El Ministerio especifica que la aplicación de la resolución autonómica «pone en riesgo de contagio no sólo a las explotaciones libres de tuberculosis de Castilla y León (ubicadas en las provincias de Valladolid, León y Burgos, declaradas oficialmente libres de infección de tuberculosis bovina por la CE), sino a las del resto de España y de la UE».
Además, la Comisión Europea, tras conocer la resolución autonómica, «había urgido al Gobierno de España a tomar medidas para poner coto a la propagación» de dicha enfermedad.
Además de esta orden, el Mapa presentó el día 23 un recurso contencioso-administrativo en el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León contra la resolución, por fijar un marco normativo «más laxo que contraviene la legislación europea y frente al inevitable riesgo de dispersión de la enfermedad a nuevas zonas, explotaciones y animales».
Los funcionarios veterinarios habían remitido un informe en el que alertaban de que la «laxitud» de la Junta ponía «en grave riesgo y en entredicho» los avances en saneamiento ganadero, además de ir en contra de la normativa estatal y comunitaria.