Carreteras estudia en Vidanes el giro de los camiones en la nueva calle
Dos negocios habían denunciado que se sentían perjudicados con la instalación de bordillos
La colocación de un bordillo doble en un tramo de camino en Vidanes paralelo a la N-625 ha generado el malestar de una gasolinera y un bar al denunciar que el bordillo impide el paso de un lado a otro «de tal manera que a la gasolinera como al bar que está al lado nos perjudica. Sólo pedimos que nos dejen tres entradas para poder aparcar o entrar a nuestros negocios ya que nosotros vivimos de la gente que va de paso por la carretera», señalaba Sergio Prieto propietario de la gasolinera Fast Fuel de Vidanes.
Desde la Subdelegación de Gobierno en León se informa que una vez mantenido contacto con la Dirección General de Carreteras, que es quien ejecuta la obra de la nueva calle de Vidanes paralela a la N-625 en el margen derecha dirección a Cistierna, se indica que la obra se ha paralizado para hacer un estudio del giro de los camiones que salen de la gasolinera.
Esta obra se ejecuta, según Carreteras, a petición de la junta vecinal de Vidanes. «Lo que argumentan desde la empresa de la gasolinera es que cuando salen los camiones el bordillo les impide hacer bien el giro. Nunca se le ha cerrado el paso a nadie», indican desde la Subdelegación del Gobierno que matiza que el proyecto cambia una línea continua por un bordillo. Carreteras ha parado unos días la obra ya que se va hacer un estudio para ver si hay radio suficiente para hacer el giro de los camiones. La solución final vendrá determinada en función de lo que resulte ese estudio de giro de los camiones.
El presidente de la junta vecinal, Ricardo Rodríguez, recordó que ya se pidió en 2019 a Carreteras que asfalte el camino y coloque una acera. «Estamos interesados en que se ejecute la obra y en ningún momento se ha pretendido aislar ningún negocio. De hecho se van a dejar varios rebajes de acceso a la nueva calle». Recuerda que la obra es exclusiva de Carreteras no de la Junta Vecinal de Vidanes.