La subida de los precios de los pastos para otorgar más ingresos a las juntas vecinales no convence a Asaja, que anuncia un recurso
Asaja impugna la nueva instrucción, que también incrementa el tiempo mínimo de pastoreo para limpiar los montes
La Delegación Territorial de la Junta busca mejorar la gestión de los pastos y que «los propietarios públicos, las Juntas Vecinales, reciban unos ingresos más justos de los que hasta ahora han percibido».
Así justifica el Servicio Territorial de Medio Ambiente de León los cambios que ha aplicado en la nueva instrucción que regula los aprovechamientos en los montes declarados de Utilidad Pública, y que será impugnada por el sindicato agrario Asaja, que critica, entre otras cuestiones, que «se incremente el precio mínimo de los aprovechamientos de pastos , de tres a cuatro euros por animal y mes, es decir, un incremento del 33 por ciento en medio de una seguía que arruina al sector».
En este punto, la organización recuerda a la Junta que la ganadería ha atravesado « una de las peores sequías de los últimos años» y que «está pagando precios desorbitados por la paja y los forrajes que compra en las zonas agrícolas», ya que tampoco ha habido cosecha, por lo que que en estas circunstancias considera que la subida que se impone «es una burla al sector».
Mejorar la gestión
También denuncia Asaja otros cambios, como el aumento del tiempo mínimo de pastoreo y las cargas ganaderas máximas y mínimas que se establecen. Fuentes de la Delegación Territorial consultadas por este periódico inciden en que muchos montes «se están cargando de matorral por falta de pastoreo adecuado con lo que esto supone de cara a poder controlar un posible incendio virulento».
Por ello, explican que los cambios están pensados «para mejorar la gestión del pastoreo a esos efectos sin olvidar que una parte importante de los ingresos de los ganaderos viene de la PAC , pero en la idea de que son dos cosas diferentes y el Servicio Territorial de Medio Ambiente tiene el objetivo principal de mejorar la gestión física del monte». Como ejemplo, afirman, «en los montes con planificación pascícola de detalle gestionados por el Servicio Territorial la superficie aprovechable es mayor que la superficie admisible a efectos de subvención».
Sobre el aumento de precio, la Delegación Territorial explica que los vecinos propietarios de ganado tienen preferencia en la adjudicación de pastos que hacen las Juntas Vecinales «y en estas adjudicaciones raramente sube el precio mínimo fijado, que está bastante por debajo de los precios de adjudicación en las subastas».
A juicio de la Junta, «se han aumentado los meses obligados de pastoreo a una cifra muy normal en la mayoría de los montes de León para evitar la matorralización creciente que acaba en detrimento del ganadero». Así, señala que desde el año 2012, el promedio de meses de pastoreo en los montes de UP de la provincia de León es de 6,01 meses, siendo el periodo mínimo establecido para el año 2024 en 5 meses.
Sin embargo, para Asaja muchos de los pastos que se adjudican «se agotan antes, sobre todo los años secos, y que en ocasiones hasta se agotan las fuentes donde abreva el ganado, por lo que no se puede exigir a los ganaderos, desplazados muchos haciendo trashumancia , que se pasen el día ‘mirando para el sol’ ellos y sus rebaños».
Tampoco comparte el sindicato agrario las cargas ganaderas máximas y mínimas que se establecen «con cambios importantes» respecto a ejercicios anteriores, aunque la organización sí ve bien «que esto se regule y que se exija el aprovechamiento efectivo». Afirma que no se puede comparar la carga ganadera de un pasto de calidad con la de un pasto residual en zonas boscosas, rocosas o de gran altura. Por eso, Asaja estima que «las cargas ganaderas se han de calcular sobre los coeficientes de admisibilidad de pastos y no sobe la superficie bruta de la parcela. Este es el criterio que utiliza a todos los efectos la Unión Europea».
En cambio, para la Junta, las cartas ganaderas «se han ampliado notablemente por debajo de la cifra anterior precisamente para permitir la adaptación a la productividad de cada parcela del monte de modo que la Junta Vecinal pueda distribuir mejor la superficie entre los ganaderos locales».
«No se entiende que Asaja prefiera una cifra fija a la posibilidad de adaptar la carga a los malos terrenos aumentando la superficie de pasto disponible para el ganadero», destacan dischas fuentes.
En otro punto Asaja considera que existe «una falta de coherencia» entre departamentos del mismo Gobierno de la Junta ya que, afirma, «mientras que la Consejería de Agricultura, en consenso con las organizaciones agrarias , ha congelado las tasas de aprovechamiento de los pastos y rastrojeras que adjudican las juntas agropecuarias locales, explican, la de Medio Ambiente, por su cuenta y riesgo, las incrementa en un 30 por ciento.» Este incremento, concluyen, «además de la consecuencia directa, crea un efecto llamada que aprovecharán sin duda las entidades locales y los particulares».