Una Eurocámara dividida sobre el estatus de protección de la especie
Los grupos políticos del Parlamento Europeo (PE) discreparon este miércoles sobre la posibilidad de modificar el estatus de protección reforzada del lobo en la UE, una semana después del cambio de rumbo de la Comisión Europea (CE), que hasta ahora había defendido su idoneidad.
La presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, se implicó en este debate a principios de este mes al asegurar que algunas concentraciones de lobos son «un verdadero peligro» para el ganado y las personas, y se abrió a rebajar la protección de la que gozan estos depredadores.
Durante un debate parlamentario, los eurodiputados del espectro progresista acusaron a la presidenta del Ejecutivo de «caer en el juego de un sector» a pocos meses de las elecciones europeas y tras el fracaso que experimentó su familia política, los populares europeos, al no tumbar la Ley de la Restauración de la Naturaleza.
El diputado, en la línea de las demandas de los grupos de los Verdes y la Izquierda, abogó por un método que permita la coexistencia entre la protección del lobo y la compensación y prevención de los ganaderos.
El Ejecutivo comunitario, que hasta ahora había defendido la idoneidad de la protección reforzada del lobo, habilitó un sistema para que las partes interesadas puedan presentar hasta el 22 de septiembre datos actualizados sobre la población de lobos y sus impactos.
La comisaria europea de Servicios Financieros, Maired McGuinness, explicó durante el debate que una vez la Comisión examine los datos presentados «decidirá sobre una propuesta para modificar, si procede, el estatus de protección del lobo en la UE».